Alberto García Lledó, portavoz de la Sociedad Española de Cardiología (SEC).
A raíz de la vacunación de la población contra el
SARS-CoV-2 con vacunas de ARNm (
Pfizer y Moderna), se han descrito una serie de casos de miocarditis, pericarditis o miopericarditis, sobre todo en varones jóvenes y con buena evolución clínica. Y así lo confirmaba el pasado viernes 3 de diciembre el
PRAC, comité de seguridad de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA, por sus siglas en inglés).
En este sentido,
Alberto García Lledó, portavoz de la Sociedad Española de Cardiología (
SEC), ha afirmado que "afortunadamente la mayoría de los casos declarados se comportan de manera leve, no suponen daño definitivo para la función miocárdica y son muy pocos los casos publicados que se han complicado con ingresos prolongados, fallecimientos y necesidad de implante cardíaco". De esta forma, también ha aclarado que el estudio francés demuestra que "la enfermedad por coronavirus se asocia por si misma a un riesgo de miocarditis".
A este respecto, García Lledó ha explicado en declaraciones a este medio que "las tasas por las que se produce el riesgo de miocarditis no son elevadísimas, hablamos de 10 casos por cada 100.000 vacunados". Asimismo, ha querido recalcar que esta inflamación del corazón "
es una enfermedad común que vemos con cierta frecuencia durante epidemias por infecciones por virus respiratorios y digestivos, afectando de manera habitual al perfil de varones jóvenes".
Dolor torácico, disnea y palpitaciones, que pueden acompañarse de arritmias y evolucionar a insuficiencia cardíaca. Estos son los síntomas y signos de sospecha de los casos de miocarditis, aunque su curso es habitualmente benigno. Por ello, García Lledó ha recalcado que "desde la SEC queremos transmitir que esto puede suceder y que, en el caso de que ocurra, el paciente no tiene que angustiarse, ya que los médicos tenemos la obligación de estar pendientes de los pacientes vacunados porque esto puede pasar y hay que diagnosticarlo".
A esto también ha querido añadir que "ni tenemos que asustar a los pacientes si les sucede, ni tampoco debe ser un motivo para que se reduzca la
vacunación que está salvando a miles de vidas".
La miocarditis, un riesgo ya presente en la vacuna de la viruela
El riesgo de miocarditis asociado a la inoculación de una
vacuna es un viejo conocido de la Medicina. El caso anterior al del
Covid-19 "es el de la viruela,
suponiendo en esta un riesgo superior que en la vacuna contra el coronavirus", tal y como ha explicado García Lledó. "En el caso de la vacuna del covid, se confirma que se asocia a después de la vacunación y que el cuadro clínico afecta al mismo perfil de pacientes que sucede en la miocarditis habitual", señala.
"Parece que los casos secundarios de la vacuna evolucionan de manera un poco más favorable"
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Además, el experto subraya que "el comportamiento no es peor que las miocarditis comunes que suelen ser enfermedades benignas que tienen buena evolución, e incluso parece que los casos secundarios de la vacuna evolucionan de manera un poco más favorable".
Mayor riesgo de miocarditis después de la segunda dosis
"Lo que hasta ahora se va viendo es que
es un riesgo real y es cierto que es mayor de miocarditis sobre todo en varones jóvenes después de estas vacunas", explica García Lledó. Asimismo, también señala que "sabemos que se produce fundamentalmente después de la segunda dosis y entre los primeros dos y siete días, y que es un fenómenos que no era desconocido para las vacunas".
Como conclusión, el portavoz de la SEC ha recalcado que para la sociedad "no supone ninguna novedad particular, simplemente confirma algo que ya conocemos y esa confirmación también soporta que la mayor parte de los casos son leves y que, a pesar de esta complicación, sigue siendo beneficioso mantener la vacunación en los niveles más altos posibles".
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