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Desde el Ministerio de Sanidad recomiendan permanecer el máximo tiempo posible de la cuarentena dentro de una habitación aislada y bien ventilada, evitando todos los contactos en la medida de lo posible.
En caso de tener que utilizar las zonas comunes, la persona positiva en Covid-19 deberá desinfectarse las manos antes y después de entrar en la estancia y utilizar mascarilla quirúrgica en todo momento. A este respecto, también es importante que se mantenga una buena higiene de manos con agua y jabón o con preparados de base alcohólica si están disponibles. Una medida extensible al resto de convivientes, y especialmente al cuidador del enfermo, tal y como apuntan las directrices marcadas por Sanidad.
Lo ideal sería que el paciente disponga de un baño de uso exclusivo. De no ser así, este tendrá que ser desinfectado con lejía doméstica después de cada utilización para evitar contagios entre el resto de inquilinos.
De forma general, es conveniente que, tanto el baño como aquellas superficies que se tocan con mayor frecuencia como las mesitas de noche, tiradores, mesas, etc, se limpien y desinfecten a diario. De igual firma, los objetos de uso personal como gafas, móviles, tablets, teclados, mandos a distancia...también tienen que ser limpiados con frecuencia.
Las autoridades sanitarias aconsejan utilizar un desinfectante doméstico que contenga una parte de lejía doméstica al 5 por ciento y 50 partes de agua, y que haya sido preparado el mismo día que se va a utilizar, ya que su efectividad desaparece a las 24 horas. Para ello, basta con echar 20 mililitros de lejía en una botella de 1L de agua y agitar.
En aquellos objetos que puedan verse dañados con el corrosivo, se podrá utilizar una solución hidroalcohólica desinfectante, rebajando el alcohol que tengamos en casa del 96 al 70 por ciento para utilizarlo como limpiador. Para conseguirlo, solo es necesario diluir 70 mililitros de etanol en 100 mililitros de agua. Para conseguir una eliminación del virus, es importante que haya una buena limpieza antes de proceder a la desinfección.
En cuanto a las prendas del paciente, la ropa de cama y las toallas, estas deben permanecer en una bolsa con cierre hermético hasta que sean lavadas, preferiblemente con jabones o detergentes habituales a 60-90 °C y sin mezclarla con el resto de ropa de la casa.
Después de cada comida, será necesario lavar los cubiertos, vasos, platos y demás utensilios reutilizables que hayan tenido contacto con el paciente, a ser posible en el lavavajillas a una temperatura superior a 50-60 grados y sino, con agua caliente y jabón, dejándola previamente en remojo. Los objetos que haya utilizado la persona contagiada deben ser los últimos en lavarse.
En caso de tener que utilizar las zonas comunes, la persona positiva en Covid-19 deberá desinfectarse las manos antes y después de entrar en la estancia y utilizar mascarilla quirúrgica en todo momento. A este respecto, también es importante que se mantenga una buena higiene de manos con agua y jabón o con preparados de base alcohólica si están disponibles. Una medida extensible al resto de convivientes, y especialmente al cuidador del enfermo, tal y como apuntan las directrices marcadas por Sanidad.
Lo ideal sería que el paciente disponga de un baño de uso exclusivo. De no ser así, este tendrá que ser desinfectado con lejía doméstica después de cada utilización para evitar contagios entre el resto de inquilinos.
De forma general, es conveniente que, tanto el baño como aquellas superficies que se tocan con mayor frecuencia como las mesitas de noche, tiradores, mesas, etc, se limpien y desinfecten a diario. De igual firma, los objetos de uso personal como gafas, móviles, tablets, teclados, mandos a distancia...también tienen que ser limpiados con frecuencia.
Las autoridades sanitarias aconsejan utilizar un desinfectante doméstico que contenga una parte de lejía doméstica al 5 por ciento y 50 partes de agua, y que haya sido preparado el mismo día que se va a utilizar, ya que su efectividad desaparece a las 24 horas. Para ello, basta con echar 20 mililitros de lejía en una botella de 1L de agua y agitar.
En aquellos objetos que puedan verse dañados con el corrosivo, se podrá utilizar una solución hidroalcohólica desinfectante, rebajando el alcohol que tengamos en casa del 96 al 70 por ciento para utilizarlo como limpiador. Para conseguirlo, solo es necesario diluir 70 mililitros de etanol en 100 mililitros de agua. Para conseguir una eliminación del virus, es importante que haya una buena limpieza antes de proceder a la desinfección.
¿Cómo debe lavarse la ropa y los cubiertos de alguien con Covid?
En cuanto a las prendas del paciente, la ropa de cama y las toallas, estas deben permanecer en una bolsa con cierre hermético hasta que sean lavadas, preferiblemente con jabones o detergentes habituales a 60-90 °C y sin mezclarla con el resto de ropa de la casa.
Después de cada comida, será necesario lavar los cubiertos, vasos, platos y demás utensilios reutilizables que hayan tenido contacto con el paciente, a ser posible en el lavavajillas a una temperatura superior a 50-60 grados y sino, con agua caliente y jabón, dejándola previamente en remojo. Los objetos que haya utilizado la persona contagiada deben ser los últimos en lavarse.
¿En qué contenedor debo depositar los guantes y las mascarillas?
A la hora de gestionar los residuos, se aconseja disponer de un cubo de basura dentro de la propia estancia, a ser posible con pedal, y una bolsa de plástico con cierre donde depositar todo el material desechable como pañuelos, guantes y mascarillas.
Esta primera bolsa, bien cerrada, debe introducirse en una segunda bolsa de basura, situada en la entrada de la habitación, donde el cuidador del paciente echará sus propios residuos y que finalmente será depositada en una tercera con el resto de los residuos domésticos destinados al contenedor de fracción 'resto'. La persona encargada de hacerlo deberá lavarse las manos inmediatamente después con agua y jabón durante entre 40 y 60 segundos como mínimo.
Esta primera bolsa, bien cerrada, debe introducirse en una segunda bolsa de basura, situada en la entrada de la habitación, donde el cuidador del paciente echará sus propios residuos y que finalmente será depositada en una tercera con el resto de los residuos domésticos destinados al contenedor de fracción 'resto'. La persona encargada de hacerlo deberá lavarse las manos inmediatamente después con agua y jabón durante entre 40 y 60 segundos como mínimo.
Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.
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