Prueba broncodilatadora

¿Qué es la prueba broncodilatadora?

La prueba broncodilatadora sirve para conocer si existen modificaciones en la salida de aire de los pulmones tras dar medicamentos que abren los bronquios (broncodilatadores). Se utiliza para ver si la utilización de broncodilatadores puede mejorar una obstrucción al paso de aire por las vías respiratorias.

¿En qué consiste la prueba?

La prueba broncodilatadora consiste en realizar una espirometría antes y después de administrar tratamiento con broncodilatadores inhalados (unos fármacos que abren los bronquios).

¿Cuándo se solicita?

En general, el test de broncodilatadores se solicita para ver si una persona tiene asma, en cuyo caso se produce una mejoría apreciable de la espirometría tras administrar los broncodilatadores.

Así es cómo debe preparse el paciente

Para la realización de la prueba de la prueba broncodilatadora la preparación del paciente es igual a la requerida en la espirometría. El paciente debe estar en situación clínica estable, es decir, no debe tener esos días problemas respiratorios.

Se debe solicitar al paciente que no consuma ninguna medicina que abra los bronquios (tanto pastillas como especialmente inhaladores) desde al menos 12 horas antes de que se realice la prueba.

Contraindicaciones del test de broncodilatadores

Para la realización del test de broncodilatadores no existe ninguna contraindicación, si bien algunas personas no la pueden hacer correctamente por dificultad para soplar, generalmente personas mayores con problemas en la boca o en la dentadura.

¿Cómo se realiza?

Para la realización de la prueba broncodilatadora se debe hacer una espirometría antes y otra entre 30 y 45 minutos después de administrar un broncodilatador, y comparar ambas pruebas. El broncodilatador se suele dar en una cámara de inhalación, es decir, una especie de botella con el broncodilatador en forma de gas en su interior. Existen distintos tipos de broncodilatadores que pueden ser administrados para realizar la prueba.

Efectos adversos

Algunas personas pueden marearse un poco por tener que tomar el aire y soltarlo en varias ocasiones. Los broncodilatadores pueden producir mal sabor de boca y algunos pueden producir una ligera taquicardia o temblor.

¿Existe algún cuidado posterior a la prueba?

No se requieren cuidados posteriores a la realización de un test de broncodilatadores.

Resultados del test de broncodilatadores

El valor a tener en cuenta es la FEV1, que es la cantidad de aire expulsado durante el primer segundo de una espiración forzada, es decir, todo el aire que se logra expulsar en un segundo cuando se solicita al paciente que eche de golpe todo el aire que tiene retenido en los pulmones. Un aumento significativo de la FEV1 tras los broncodilatadores se considera una prueba positiva y por tanto sugestiva de asma.