Una
prueba de sangre oculta en heces sirve para conocer si existe pérdida de sangre por el aparato digestivo. Si bien en muchas ocasiones esto puede ser percibido fácilmente (se ve sangre roja en las heces o las heces son negras como la pez), en otras muchas circunstancias la pérdida de sangre es tan pequeña que no puede ser percibida a simple vista y hay que hacer este tipo de prueba. La prueba detecta la presencia de cantidades microscópicas de sangre en las heces. En general detecta la presencia de una proteína presente en los glóbulos rojos llamada
hemoglobina.
¿Cuándo se solicita una prueba de sangre oculta en heces?
Una prueba de sangre oculta en heces se solicita en personas que tienen
anemia por falta de hierro o, como medida preventiva, para diagnosticar de forma precoz la presencia de un
cáncer de colon en personas mayores de 50 años.
No tiene sentido solicitarla en personas en las que se ve claramente que están perdiendo sangre por las heces, porque la prueba va a ser obviamente positiva.
¿Cómo debe prepararse el paciente para una prueba de sangre oculta en heces?
No es conveniente realizar una prueba de sangre oculta en heces si:
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El paciente está con diarrea o con una infección de tripa.
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Si está sangrando por hemorroides o por una fisura anal.
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Si ha habido sangrado reciente por las encías o por la nariz, dado que la sangre que se pierde desde estos lugares es tragada y pasa al aparato digestivo.
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En el caso de ser una mujer, si está con la menstruación.
Es conveniente que el paciente no consuma desde 3 días antes alimentos que puedan dar un resultado falsamente positivo. Estos alimentos dependen del tipo de test empleado pero en general deben evitarse:
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Los alimentos que puedan contener sangre procedente de los animales (carne, embutidos frescos, morcilla o vísceras).
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Zanahorias, calabaza, remolacha, brócoli, coliflor, rábanos, setas, uvas.
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La prueba tiene una difícil interpretación en personas que consumen aspirina u otros anti-inflamatorios dado que estas medicinas pueden producir pequeños sangrados por daño de la pared del estómago. Por ello se debe recomendar suspender la toma de anti-inflamatorios o de aspirina, si se toma a dosis altas, 7 días antes de la prueba.
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Se recomienda suspender la toma de vitamina C.
No es necesario suspender el tratamiento con hierro.
¿Existe alguna contraindicación para la prueba de sangre oculta en heces?
La determinación de sangre oculta en heces no tiene contraindicaciones.
¿Cómo debe realizarse la prueba de sangre oculta en heces?
Para la determinación de sangre oculta en heces habitualmente se solicitan
3 muestras de heces recogidas en días distintos, generalmente alternos. Cualquier lesión del intestino (úlcera, pólipo, cáncer), si sangra, puede hacerlo de forma intermitente, y puede ocurrir que si recogemos una sola muestra ésta salga negativa. Cuantas más muestras se obtengan, más posibilidades existen de obtener una muestra un día que haya habido sangrado. Las muestras deben recogerse en un bote especial para guardar heces, en 3 días distintos, guardando en la nevera cada una de las muestras recogidas para llevarlas todas juntas el último día al Hospital o al lugar donde hagan el análisis. Para
evitar la descomposición de la hemoglobina es conveniente protegerlas de la luz por lo que se recomienda envolver los tubos con las heces en papel de aluminio.
¿Existe algún efecto adverso de la prueba?
La prueba de sangre oculta en heces no tiene efectos adversos.
¿Existe algún cuidado posterior a la prueba?
La prueba de sangre oculta en heces no requiere cuidados posteriores.
¿Cómo se interpreta la prueba de sangre oculta en heces?
El resultado puede ser negativo (cuando no hay sangrado), positivo (cuando sí hay sangrado) o dudoso.
La pérdida de sangre por las heces puede deberse a infinidad de enfermedades del esófago, estómago e intestino:
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Pólipos benignos o cánceres malignos del colon.
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Divertículos del colon.
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Angiodisplasia de colon.
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Hemorroides o fisura anal.
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Infecciones del colon o inflamaciones (enfermedad de Crohn, colitis ulcerosa).
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Cánceres de estómago.
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Ulceras en el estómago.
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Gastritis.
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Esofagitis.
En general, un test positivo debe llevar al médico a solicitar diversas pruebas para detectar la enfermedad responsable del sangrado.
Aunque esta información ha sido redactada por un especialista médico, su edición ha sido llevada a cabo por periodistas, por lo que es un contenido meramente orientativo y sin valor de indicación terapéutica ni diagnóstica. Recomendamos al lector/a que cualquier duda relacionada con la salud la consulte directamente con el profesional del ámbito sanitario correspondiente.