El potasio es una sustancia necesaria para la normal contracción de los músculos, incluido el músculo cardiaco (corazón). La cantidad de potasio en sangre debe situarse en unos márgenes muy estrechos para evitar complicaciones graves.
Se considera que el potasio está alto cuando su concentración en sangre es mayor de 5 mmol/L.
¿Qué causa la subida del potasio?
La hiperpotasemia suele deberse a una disminución de la eliminación de potasio por la orina y, excepcionalmente, a un aumento de la liberación de potasio desde las células. Las causas más frecuentes son:
-
La administración de determinados medicamentos, fundamentalmente medicinas para bajar la presión arterial que impiden una normal eliminación del potasio por la orina. Dentro de ellos se encuentran los inhibidores de la enzima conversora de la angiotensina (captopril, enalapril, etc.), los diuréticos ahorradores de potasio (espironolactona), los anti-inflamatorios y la heparina.
-
La imposibilidad del riñón para eliminar el exceso de potasio del organismo, es decir, la insuficiencia renal aguda o crónica.
-
El descenso de diversas hormonas, generalmente las producidas por las glándulas suprarrenales (insuficiencia suprarrenal o enfermedad de Addison), que impiden que el potasio sea eliminado por la orina.
-
La destrucción masiva de diversos tumores al ser tratados con quimioterapia.
¿Cuáles son los síntomas de la hiperpotasemia?
La hiperpotasemia es habitualmente un hallazgo casual en pacientes que se hacen análisis por otros motivos. Sin embargo puede producir:
-
Debilidad, que en situaciones muy graves puede llevar a la parálisis incluso respiratoria.
-
Alteraciones en el corazón, con cambios en el electrocardiograma que, en casos graves, pueden producir arritmias malignas que lleven a la muerte.
¿Cómo se diagnostica?
El diagnóstico consiste en determinar un potasio alto en sangre y confirmarlo en un segundo análisis. Si persiste alto es necesario conocer cómo funciona el riñón y el tipo de medicamentos que toma el paciente. En general una buena historia clínica diagnostica la mayoría de casos de potasio alto. Si esto no es así, es aconsejable solicitar un análisis de orina que determine la cantidad de potasio que se está eliminando por la orina y nuevos análisis de sangre, generalmente dirigidos a valorar el estado de diferentes hormonas (aldosterona, renina, cortisol, etc.).
¿Cuál es el tratamiento de la hiperpotasemia?
El tratamiento de la hiperpotasemia requiere normalizar la cantidad de potasio de la sangre y corregir la causa responsable de su aumento.
-
Si el potasio en sangre está muy alto lo primero que hay que hacer es bajarlo. Se pueden administrar diuréticos para forzar su eliminación por la orina y, si la elevación del potasio es grave, sueros con glucosa junto a insulina y bicarbonato. En casos de elevación más leve se pueden utilizar resinas de calcio que impiden la absorción del potasio en el intestino.
-
Lo siguiente que se debe hacer es corregir la causa que ha producido la subida de potasio. Si se debe al uso de medicamentos, fundamentalmente inhibidores de la enzima conversora de la angiotensina o diuréticos ahorradores de potasio, se deben retirar. Si es debido a que el riñón no funciona bien se debe recomendar una dieta pobre en potasio. En pacientes con insuficiencia renal, una hiperpotasemia que no se corrige con dieta y con resinas de calcio es uno de los motivos que indican que es el momento de iniciar la diálisis.
Aunque esta información ha sido redactada por un especialista médico, su edición ha sido llevada a cabo por periodistas, por lo que es un contenido meramente orientativo y sin valor de indicación terapéutica ni diagnóstica. Recomendamos al lector/a que cualquier duda relacionada con la salud la consulte directamente con el profesional del ámbito sanitario correspondiente.