Diccionario de enfermedades

Artritis

¿Cómo se diagnostica la artritis?
Las articulaciones son las zonas de unión entre los huesos. Una artritis es una inflamación de una o de varias de estas articulaciones.

Las artritis pueden afectar a:
  • Una única articulación (monoartritis)
  • Varias articulaciones (oligoartritis)
  • Múltiples articulaciones (poliartritis)
A su vez, la afectación de varias articulaciones puede ser o no simétrica, un dato importante para que el médico conozca la causa de la inflamación articular.

Las articulaciones que más frecuentemente presentan inflamación son las de los dedos de las manos o de los pies (articulaciones interfalángicas), las de las manos (metacarpofalángicas), las de los pies (metatarsofalángicas), las muñecas, codos, hombros, rodillas, caderas, columna vertebral y sacroiliacas.

¿Cuáles son las causas de la artritis?


Las causas de las artritis pueden ser muy variadas. Existen más de 100 enfermedades que producen artritis. En general, el diagnóstico se suele enfocar mejor teniendo en cuenta las enfermedades que afectan con más frecuencia a una única articulación (monoartritis) y las que afectan con más frecuencia a varias articulaciones (poliartritis), si bien, habitualmente, la mayoría de enfermedades pueden afectar en un determinado momento a una única articulación o a varias:
  • Monoartritis. Las causas más frecuentes son la gota, la condrocalcinosis, las debidas a una artrosis, las debidas a traumatismos y las de causa infecciosa.
  • Poliartritis. Las causas más frecuente son la artritis reumatoide, la espondilitis anquilosante y las artritis asociadas a psoriasis u otras enfermedades.

¿Qué síntomas produce la enfermedad?


Las artritis se caracterizan por:
  • Dolor en la articulación (artralgia), sobre todo al intentar realizar un movimiento.
  • Calor, enrojecimiento e inflamación más o menos importante en la zona de la articulación. La inflamación, el calor y el enrojecimiento pueden ser difíciles de percibir cuando se afectan articulaciones de gran tamaño como la cadera o el hombro.
  • Rigidez que dificulta el inicio del movimiento, sobre todo después de haber pasado un tiempo sin mover la articulación, por ejemplo al levantarse por la mañana.
  • Las artritis pueden acompañarse de fiebre, malestar general y otros muchos síntomas dependiendo de cuál sea la enfermedad causante de la misma.

¿Cómo se diagnostica?


El diagnóstico de artritis es un diagnóstico clínico, tras escuchar los síntomas del paciente y observar la articulación caliente, inflamada, roja y dolorosa, espontáneamente o al movilizarla.

Para conocer la causa de la artritis hay que valorar la presencia de otros síntomas o signos clínicos y, en muchas ocasiones, se requiere realizar diversas pruebas diagnósticas, como análisis de sangre, radiografías, ecografía de la articulación, RMN o extracción de líquido del interior de la articulación (artrocentesis).

Tratamiento de las artritis


El tratamiento depende de la enfermedad responsable de la artritis.

En general, durante un episodio agudo de artritis se recomienda dejar en reposo la articulación y poner tratamiento con anti-inflamatorios y frío local.

El resto del tratamiento depende de la causa de la artritis que siempre debe ser investigada.
Aunque esta información ha sido redactada por un especialista médico, su edición ha sido llevada a cabo por periodistas, por lo que es un contenido meramente orientativo y sin valor de indicación terapéutica ni diagnóstica. Recomendamos al lector/a que cualquier duda relacionada con la salud la consulte directamente con el profesional del ámbito sanitario correspondiente.