Las aftas, llagas o úlceras orales son un problema frecuente en niños y jóvenes, que con frecuencia aparecen varias veces al año.
¿Cuáles son las causas de las aftas orales?
Se desconoce cual es la causa de las aftas orales, aunque
pudieran tratarse de una infección por virus. No deben confundirse con las lesiones del herpes simple oral, el cual produce una infección caracterizada por fiebre, malestar general y aparición de múltiples úlceras dolorosas dentro de la boca pero también fuera de la misma (en los labios, nariz, etc..). Las aftas orales aparecen frecuentemente en personas jóvenes cuando les bajan las defensas, como por ejemplo:
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Tras una extracción o manipulación dentaria.
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Tras la colocación de aparatos en la boca, por ejemplo de ortodoncia.
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Tras heridas en la boca por cualquier causa (por ejemplo morderse un carrillo).
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Tras infecciones en cualquier otra parte del cuerpo.
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En situaciones de estrés, por ejemplo en época de exámenes.
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Por cambios hormonales o en relación con el ciclo menstrual.
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Por falta de vitaminas.
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Por alguna alergia a algún alimento.
Existen enfermedades infrecuentes que se asocian a la aparición de aftas orales recurrentes, como la enfermedad de Behçet, la enfermedad de Crohn, la enfermedad celiaca, etc.
Recientemente se ha relacionado la aparición de aftas orales con la infección por Helicobacter pylori, la bacteria responsable de las úlceras de estómago.
¿Qué síntomas producen las llagas orales?
Las aftas orales son
úlceras dolorosas que aparecen en varias localizaciones del interior de la boca como la lengua, encías, paladar, interior de los carrillos, labios, etc. Las úlceras tienen un fondo blanquecino o amarillento y están rodeadas de una zona rojiza.
Ocasionalmente se acompañan de
fiebre y de
inflamación de los ganglios del cuello, los cuales pueden ser dolorosos (adenopatías). Las personas con úlceras en la boca pueden tener dificultades importantes para comer. Una vez que aparecen pueden tardar varios días o incluso semanas en curarse del todo.
Las úlceras de la boca son frecuentemente recurrentes, es decir, aparecen varias veces a lo largo de la vida, con frecuencia entre 2 y 3 veces al año.
¿Cómo se diagnostican?
Las aftas orales suelen afectar a personas jóvenes, ser múltiples y muy dolorosas. No se suelen realizar pruebas dirigidas a conocer su causa. Deben de distinguirse de otras enfermedades que también pueden producir úlceras en la boca, como la infección por herpes simple, en la cual suelen existir también lesiones fuera de la boca, en los labios y la nariz, y de algunas enfermedades que suelen producir lesiones únicas, como el cáncer de boca o el liquen plano, y de la infección por hongos (
candidiasis oral).
¿Son hereditarias?
Las personas con aftas orales tienen con frecuencia familiares que también han tenido aftas de jóvenes.
¿Son contagiosas?
En general las aftas orales no son contagiosas. Sin embargo, dado que pueden ser confundidas con una infección por herpes, la cual es muy contagiosa, no se debe besar a nadie o contactar con la saliva de una persona con aftas orales.
¿Pueden prevenirse las úlceras orales?
En general las aftas orales no pueden prevenirse. Se deben evitar algunos alimentos que pueden desencadenar un brote, como los alimentos muy picantes o muy ácidos, y se deben evitar aquellas situaciones que puedan irritar la boca, como mascar chicle, manipular mucho los aparatos de ortodoncia, realizar limpiezas dentales muy agresivas, etc. También se debe mantener una
adecuada higiene dental, con cepillado frecuente de los dientes, encías y lengua y enjuagues con antisépticos. Deben evitarse las pastas dentífricas con lauril sulfato.
Por último deben evitarse las situaciones estresantes en la medida de lo posible.
¿Cuál es su pronóstico?
El pronóstico de las aftas orales es bueno después de varios días o semanas.
¿Cuál es el tratamiento de las aftas orales?
No existe un tratamiento específico de las aftas orales. Las aftas se curan solas después de varios días o semanas y, mientras tanto, lo único que puede hacerse es recibir un
tratamiento sintomático (para los síntomas):
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Algunos alimentos ácidos, muy condimentados, muy picantes o calientes pueden aumentar el dolor, por lo que deben evitarse.
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De forma casera se puede mezclar en la misma proporción una parte de agua oxigenada y otra de agua del grifo y aplicarla con un bastoncillo en cada úlcera. Posteriormente se puede poner en el interior de cada úlcera una pincelada de Maalox, una solución de sulfato de magnesio habitualmente utilizada para el tratamiento de la úlcera de estómago. Esto debe realizarse 3 o 4 veces al día.
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También se puede fabricar una solución que lleve una o dos cucharadas de Maalox y una cucharada de un jarabe para la alergia (difenhidramina). Con esta solución se deben hacer enjuagues y, posteriormente, escupirla. Esto debe realizarse 3 o 4 veces al día.
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Pueden también hacerse enjuagues orales de agua con sal.
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En casos más graves pueden utilizarse líquidos de venta libre en farmacia que llevan mezclas de corticoides y anestésicos locales (tipo benzocaína o lidocaína) o geles con clorhexidina. La aplicación de nitrato de plata o debacterol en cada una de las úlceras puede producir también un alivio rápido de los síntomas y una curación en pocos días de las aftas al “quemar” la lesión. Estas medicinas deben ser aplicadas por un médico. Las pastillas de clorato de potasio colocadas durante un rato sobre la lesión y posteriormente escupidas también pueden producir un alivio rápido de los síntomas.
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Algunos estudios han demostrado que, en aquellos pacientes con infección por Helicobacter pylori, el tratamiento de esta bacteria produce una desaparición de los brotes recurrentes de aftas orales.
Aunque esta información ha sido redactada por un especialista médico, su edición ha sido llevada a cabo por periodistas, por lo que es un contenido meramente orientativo y sin valor de indicación terapéutica ni diagnóstica. Recomendamos al lector/a que cualquier duda relacionada con la salud la consulte directamente con el profesional del ámbito sanitario correspondiente.