Ylenia, una enfermera española contra la restrictiva sanidad australiana

Ni es oro todo lo que reluce ni el "sueño australiano" es tan idílico como parece, según ha podido comprobar Ylenia Morales en estos últimos meses. Aunque las exigencias de idioma no son elevadas, poder ejercer como profesional en uno de los mejores sistemas sanitarios del mundo requiere una gran cantidad de tiempo y de dinero. Aún así, las condiciones laborales y el ritmo de trabajo hacen que merezca la pena en opinión de la tinerfeña, dispuesta a exprimir al máximo su experiencia al otro lado del planeta. 




Los comienzos en Sídney, reconoce, no fueron fáciles debido al gran desembolso inicial en vacunas y trámites, pero su determinación hizo que pudiera comenzar a trabajar como auxiliar a los pocos días de aterrizar. Una vez acomodada, espera poder conseguir el Registro de Enfermería y dedicarse a lo que realmente le gusta dentro de la profesión: la estética. 

Ventajas de la sanidad australiana 

Si algo ha conseguido sorprender a Ylenia como sanitaria en Australia ha sido el reducido ratio de pacientes por profesional, la capacitación de los especialistas y el reparto de tareas, con un abordaje clínico eminentemente multidisciplinar y centrado en el paciente. Aún así, las competencias del colectivo son menores en el modelo australiano y más asequibles para enfermeras "curtidas" como ella en el sistema sanitario español. 

En cuanto a su experiencia, valora y mucho la flexibilidad que presenta este sistema con unos rangos salariales muy diferentes a los de España que le permiten organizar viajes y coger un avión prácticamente una vez al mes. Australia, sin embargo, es solo el punto de partida de su trayectoria como enfermera, plagada de proyectos de futuro e inquietudes tanto dentro como fuera de las fronteras del Sistema Nacional de Salud (SNS).