La mayoría de los médicos de Atención Primaria están soportando unas cargas de trabajo excesivas que en muchos casos se verán incrementadas por la falta de contratación de sustitutos para cubrir las ausencias por vacaciones de sus compañeros.
Las administraciones sanitarias parece que no tienen claros los límites hasta donde se puede llegar recortando en Sanidad, SÍ, en esa Sanidad que nuestros políticos decían que no iba a sufrir recortes.
La realidad es que recortan, recortan y siguen recortando hasta tal punto que en muchos centros de salud, asfixiados por la insuficiente plantilla y la falta de sustitución de las ausencias, los médicos de Primaria a duras penas están consiguiendo mantener una calidad asistencial aceptable, pero para conseguirlo están ofreciendo su total implicación a costa de su salud, aunque como no pueden hacer milagros esta situación no se puede mantener indefinidamente. Ya están al límite.
Cuando en la mayoría de los centros de salud de muchas comunidades autónomas las cargas de trabajo que soportan los médicos son excesivas y en muchas ocasiones llegan a ser insoportables, las agendas con 40, 50 o más pacientes al día son demasiado frecuentes, esto como consecuencia de:
- Plantillas insuficientes y que con la crisis se han recortado aún más, como consecuencia de que en muchos casos no se cubren las jubilaciones o defunciones de los compañeros. Precisamente estos días hemos conocido en el boletín estadístico del Ministerio de Hacienda, que entre junio de 2013 y enero de 2014 las plantillas han crecido en 3.403 empleados públicos y sin embargo y de forma incomprensible en las Instituciones Sanitarias del Sistema Nacional de Salud se han perdido 5.953 puestos.
- Incremento de la demanda de consultas por la cada vez mayor proporción de pacientes mayores de 65 años y 85 años con más procesos pluripatologicos crónicos propios de la edad.
- Disminución progresiva del presupuesto dedicado a Atención Primaria, que ha pasado del 15,6 por ciento en 2007 al 14,8 por ciento en 2012, totalmente insuficiente y muy alejado del 25 por ciento de presupuesto sanitario considerado como imprescindible para un buen funcionamiento del sistema por las autoridades sanitarias internacionales.
Por todo ello y de cara al periodo vacacional que comienza, si no se sustituyen las ausencias de los médicos en Primaria y como ya están al límite de sus fuerzas y no pueden hacer milagros, corremos graves riesgos derivados de las insoportables cargas de trabajo:
- La salud psicofísica de muchos miles de Médicos de AP en nuestros centros de salud se pondrá en peligro por el nivel de ansiedad y estrés que van a soportar.
- La adecuada relación médico-paciente, tan necesaria para una asistencia sanitaria de calidad, se verá gravemente afectada y sobrecargará el sistema sanitario.
- Se incrementará de forma importante la insatisfacción de los pacientes y como consecuencia habrá riesgo de más agresiones.
- El ejercicio de la profesión en estas condiciones tan adversas podría causar un incremento de los errores médicos involuntarios.
Por lo tanto, para conservar la calidad asistencial que reciben los pacientes y la salud psicofísica de los médicos, se deben habilitar los presupuestos necesarios, para cubrir las ausencias reglamentarias de estos médicos saturados y al límite de sus fuerzas.
Sin una financiación suficiente y adecuada de la Atención Primaria, que soluciona de forma muy eficiente más de 250 millones de consultas al año, el buen sistema sanitario público español que disfrutamos, no será sostenible.
¡Muchos médicos de Atención Primaria ya están al límite de sus fuerzas y no pueden hacer milagros!