El País se fija hoy en una de las pruebas diagnósticas más conocidas que, al parecer, no es correctamente utilizada: Los hospitales infrautilizan sus equipos de resonancia magnética. Y añade en el subtítulo: Sanidad apenas tendría que derivar a la privada si usara al máximo sus recursos. No alude al Ministerio sino a la Consejería madrileña, otra vez en el objetivo del periódico de Prisa. “Según datos internos sobre resonancias magnéticas, hay hospitales que realizan menos de 300 pruebas al mes por equipo, mientras otros rozan o incluso superan las 700. Incluso en centros con las mismas características —los que Sanidad clasifica dentro del grupo funcional 3— las diferencias son abrumadoras: hay hospitales que utilizan sus equipos el doble que otros”.
En Asturias, La Nueva España abre a cuatro columnas: El grupo de [Carlos López] Otín certifica un cambio de estrategia en la lucha contra el cáncer. Bajo el antetítulo Avance científico con importante participación asturiana y con el subtítulo El hallazgo de un gen que causa leucemias y también melanomas aconseja centrar la investigación en el genoma de cada paciente y no en el tipo de tumor.
Y en Extremadura, Hoy abre a toda página: Extremadura, una de las más lentas en resolver expedientes de dependencia. Y añade en el subtítulo: El informe del Tribunal de Cuentas afirma que a pesar de la demora, la región ha mejorado los números de su gestión en poco tiempo. En la región se ha reconocido el derecho a percibir prestaciones por dependencia a 25.062 personas, de las que 4.214 están esperando a que se haga efectivo. El plazo medio en resolver las solicitudes supera los 300 días, cuando la media de España es de 246.