El País lleva hoy a su portada los problemas que sigue generando el nuevo copago farmacéutico, aprobado por el Gobierno va a hacer ahora un año. Su titular es el siguiente: Las autonomías avisan al Gobierno de nuevos errores en el copago. El principal inconveniente es la clasificación de los usuarios en función de la renta, que no es todo lo precisa que debiera. Si a ello le añadimos la voluntad política, manifestada en el último Consejo Interterritorial, de crear nuevos tramos de renta para reordenar los actuales copagos, el sistema informático de clasificación puede averiarse definitivamente.
El Ministerio de Sanidad reconoce que puede haber “casos de discrepancias” con la clasificación que se les ha asignado a los ciudadanos, por su renta. El sistema consiste en una catalogación por códigos que se recoge en una base de datos, que cruza información del Instituto Nacional de la Seguridad Social, Hacienda y los servicios de salud. Sanidad explica que ha establecido un circuito para que las Administraciones autónomas puedan comunicar los errores, se comprueben y, en su caso, se subsanen.
Según detalla el periódico de Prisa, a Asturias le preocupa que se sigan produciendo errores en el sistema. Esta autonomía —que ha recurrido el aumento del copago— ha advertido a Sanidad de los fallos. También Andalucía —otra de las seis que ha recurrido la ley—, que además de informar al Ministerio a través del circuito específico, alertó del desorden a la Delegación del Gobierno. Pero, los errores, precisa una portavoz de la consejería, se siguen dando. En Murcia, los errores son menores que durante los primeros días de aplicación de la ley. Esta región, ha desarrollado un sistema propio para recoger incidencias.
Y en Navarra no se ha detectado una avalancha de casos, pero su Administración ha hallado un sistema para resolverlos hasta que la base de datos estatal los subsane. “Cuando detectamos un fallo clasificamos a ese usuario en el nivel más bajo de aportación para que no se vea perjudicado por ese error”, explica una portavoz de la Consejería de Salud.