El Acuerdo Transatlántico para el Comercio y la Inversión (TTIP) que negocian Estados Unidos y la UE parece que dejará fuera la salud. Sí recogerá, sin embargo, aspectos relacionados como el producto sanitario o los medicamentos. Este futuro documento, que todavía está en fases muy iniciales, parece que no convence demasiado a los europeos, hasta el punto de que en las más de 150.000 opiniones que ha recabado la UE prevalece la duda, reclamando que se proteja específicamente a los sistemas de salud.
A falta de que se confirme definitivamente este extremo, parece que la sanidad sí está presente en otra negociación entre la UE, EEUU y otros países, el Acuerdo sobre el Comercio de Servicios (TISA). O al menos así lo asegura eldiario.es, que se remite a un documento al que ha tenido acceso y según el cual “los pacientes/clientes viajan para ser tratados a otros países con, al menos, parte de los gastos sufragados por los sistemas nacionales de salud o las aseguradoras de origen”.
Así, en un texto titulado ‘La UE negocia en secreto que los sistemas nacionales de salud paguen tratamientos privados en el extranjero’ el diario digital que dirige Ignacio Escolar explica que el enfermo recibiría el tratamiento en el extranjero y luego tendría derecho a pedir el reembolso de los gastos hasta el coste del tratamiento en el país de origen, y va más allá, ya que señala que “los países de acogida deberían hacerse responsables de cualquier cuidado necesario después del tratamiento”.
En este sentido, el diario.es apunta también que este acuerdo facilitaría que las empresas de sanidad privada compitieran para captar a estos clientes. Además, según refleja el periódico, el texto que ha recibido filtrado señala que este sector “ha jugado un papel muy menor en el comercio internacional de servicios”, lo que supone que “existe un enorme potencial por desarrollar” en este campo.