El Economista abre su edición de hoy con un tema sanitario y polémico: Cataluña se propone cobrar 25 euros por ir a urgencias, dice, en un titular a cuatro columnas. Y añade en el subtítulo: Inicia contactos con el resto de autonomías para recabar apoyos a su proyecto.
En efecto, la Generalitat de Cataluña ha iniciado una ronda de contactos entre las comunidades autónomas para lograr apoyos a su propuesta de implantar el copago en las urgencias hospitalarias. La Administración catalana, según el rotativo económico, “tiene muy avanzado un proyecto que contempla el pago de entre 15 y 25 euros a todos los usuarios que acudan a urgencias”.
Igual que ocurriría con el euro por receta, el objetivo de la Generalitat con esta propuesta es doble: “Por un lado, tiene una vertiente claramente recaudatoria, pero por el otro trata de desincentivar que las personas acudan a las urgencias de los hospitales y sean asistidas en los centros de atención primaria de la red pública”. La Administración considera que en determinados momentos (por ejemplo, con la gripe) se produce un abuso de las urgencias, que quedan colapsadas.