La Comunidad de Madrid ha comenzado la mayor oposición sanitaria pública de España con la prueba de Médicos de Familia y Matronas. En total se ofrecen 3.571 plazas a las que se han presentado 84.144 aspirantes, también para pediatras de Atención Primaria, fisioterapeutas y Enfermería y auxiliares de Enfermería. En este caso, los números hablan por sí solos. El Gobierno de Ignacio González da un paso adelante y reafirma su apuesta y avance por la estabilidad. Otro aspecto significativo de esta convocatoria es el elevado número de profesionales de otras comunidades autónomas que se desplazan a Madrid para examinarse.Se trata de un gesto de compromiso político en un momento en el que todavía los efectos de la crisis están presentes, lo que otorga una trascendencia mayor a la medida.