José A. Puglisi / Imagen: Miguel Fernández de Vega. Valencia
Los sistemas de sanidad internacional están preocupados por el rápido crecimiento de la resistencia a los antibióticos. En la 37 edición del Congreso Nacional de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen), se ha explicado que, en España, una de las principales causas radica en el excesivo consumo de antimicrobianos por parte del paciente. “Tan sólo el 20 por ciento de los ciudadanos que han tomado un antibiótico lo necesitaban y, en la mayoría de los casos, en una dosis inferior a la tomada”, ha precisado Carles Llor Vila, médico de familia en el Centro de Salud Vía Roma.
José Luis Cañada, coordinador nacional del grupo de trabajo de Enfermedades Infecciosas de Semergen; Carles Llor Vila, médico de familia en el Centro de Salud Vía Roma; Belén Crespo, directora de Aemps; Antonio López, jefe de Enfermedades Infecciosas de Aemps; y Rocío Fernández, farmacéutica de Atención Primaria en Sevilla.
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En línea para combatir esta tendencia, Belén Crespo, directora de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps), ha explicado que han desarrollado el Plan Nacional de Resistencia Antibiótica, una iniciativa que cuenta con “el apoyo de seis ministerios, así como de todas las comunidades autónomas, cerca de 70 sociedades científicas y 200 expertos en sanidad”. El equipo, que buscará conocer los motivos del alto índice de consumo de antimicrobianos y favorecer la lucha contra la resistencia antibiótica, ha contado durante los últimos dos años con una dotación que supera los 500.000 euros, aproximadamente.
Antonio López, jefe de Enfermedades Infecciosas de Aemps, ha adelantado que el proyecto cuenta con 84 acciones que se distribuyen en seis áreas determinadas: vigilar el consumo de antibióticos, controlar la resistencia, identificar e impulsar medidas alternativas, definir prioridades en las líneas de investigación, formar a los profesionales del sistema sanitario y comunicar a la población. “Ante los datos registrados en España, el último punto será el más importante, ya que ayudará a reducir la previsión de 300.000 muertes por resistencia a los antibióticos para 2050”.
Belén Crespo, directora de Aemps.
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“La información será una gran herramienta, ya que la mayoría de los ciudadanos se toman un antibiótico que, realmente, no ataca a la bacteria que tiene en el organismo”, ha precisado José Luis Cañada, coordinador nacional del grupo de trabajo de Enfermedades Infecciosas de Semergen. En este sentido, ha recomendado una reducción en los casos de automedicación, así como formar a todo el personal del sistema sanitario sobre el mecanismo de acción que tienen los antimicrobianos.
En conjunto con el Plan Nacional de Aemps, algunas comunidades autónomas también han tomado cartas en el asunto. Rocío Fernández, farmacéutica de Atención Primaria en Sevilla, ha adelantado que “las medidas que mejor funcionan son las actividades multifactoriales, debido a que permiten una mayor coordinación entre todas las partes de la sociedad”. En este sentido, apunta que “hasta la fecha, es la mejor herramienta que tenemos para combatir el elevado nivel de resistencia antibiótica y promover una reducción en el número de prescripciones innecesarias”. Un reto que están cumpliendo, ya que a través del programa Aljarafe han registrado una caída del 13 por ciento en el número de prescripciones en Andalucía.
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