ASISA, Sanitas o IMQ son algunos de los grupos sanitarios de los clubes de Primera.
Hay un dato clave con el que se podría resumir a la perfección este
primer cuarto de temporada del FC Barcelona:
Leo Messi ha jugado todos los minutos posibles desde el inicio de la campaña, a excepción precisamente del partido de Copa del Rey del pasado martes ante el Murcia, una ausencia pactada con su técnico, Ernesto Valverde. Nunca había ocurrido hasta la fecha que ‘La Pulga’ no tuviese un solo descanso en los primeros nueve partidos de la Liga Santander, además de los correspondientes compromisos del club azulgrana en la Champions y de la selección argentina en la fase de clasificación sudamericana para el Mundial 2018. Todo ello se traduce en que
el Barça sea líder en el campeonato doméstico con cuatro puntos de ventaja sobre el Valencia, en Europa
comande el grupo D por delante de la Juventus y en que
Argentina se haya clasificado para la cita en Rusia del próximo verano. Por eso, la gran pregunta es: ¿cómo ha logrado el ‘diez’ aguantar físicamente más de 1.000 minutos de juego en apenas tres meses? O, dicho de otro modo: ¿quién está detrás de su inmejorable salud?
Desde hace 12 años,
Assistència Sanitària está detrás de cada
reconocimiento médico que se realiza a los nuevos fichajes del club azulgrana, dispone de un
servicio de atención continuada de traumatología en el propio Camp Nou –del que pueden disfrutar los asegurados, excepto en los días de partido- y realiza el
seguimiento y tratamiento de los jugadores del club. Y, aunque en el estado físico de la plantilla no sólo interviene el cuerpo médico de las mutuas, aseguradoras o grupos hospitalarios asociados, buena parte de la salud de los futbolistas de élite de la mejor liga del mundo depende de ellas.
ASISA, Sanitas, IMQ o el grupo Vythas son algunas de las compañías que cuidan de las estrellas de LaLiga.
ASISA es el grupo sanitario con mayor presencia en la Liga Santander y está detrás de la salud del
Levante UD, el Real Betis Balompié y el Villarreal CF. Con el mismo número de socios, el grupo
IMQ se centra en el País Vasco, donde asiste al
Alavés, el Athletic y el Eibar. Sanitas y el Real Madrid mantienen una productiva relación de varios años, mientras que el
FC Barcelona trabaja con la citada Assistència Sanitària y el Atlético con FREMAP.
Como ejemplo, la labor de
ASISA “en líneas generales, incluye, además de ser proveedores de salud, la condición de patrocinadores y la cobertura de los equipos de sus canteras”, según explica
Carlos Eiroa, Director de Publicidad de ASISA. Una vinculación que “se enmarca en nuestros principios corporativos y en el compromiso que tenemos con el patrocinio de actividades y entidades que fomentan el deporte y los
hábitos de vida saludable y que apuestan por el trabajo en equipo, la competitividad, la superación personal y la constancia como señas de identidad”, agrega.
Iñaki Ereño, junto a Florentino Pérez con una camiseta del Real Madrid para anunciar la renovación del acuerdo de colaboración hasta 2018.
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Sin embargo, no todos los asegurados de la compañía pueden presumir de Balón de Oro en una estantería de su salón; ni siquiera de poder ser tercer portero de un recién ascendido. Algo que no supone una distinción para Eiroa, que defiende que
tanto Cristiano Ronaldo como Manolo el del Bombo merecen los mismos servicios: “Como compañía tratamos de dar a todos nuestros asegurados un trato excelente, acompañándoles cuando necesitan asistencia y ayudándoles a cuidar su salud con una estrategia de fomento de la prevención”.
En el caso concreto de ASISA, la gestión que realiza la compañía respecto a la salud de los deportistas trata de
trasladar “a los clubs deportivos de élite el aseguramiento que realizamos a cualquier cliente, garantizando el acceso a nuestros cuadros médicos y a los medios de diagnóstico y tratamiento más avanzados”. Eso sí, siempre como complemento a la dirección médica de cada club, ya que “esa labor corresponde a los clubs”, como señala Eiroa.
“Facilitamos el acceso a nuestra red asistencial, gestionando los reconocimientos médicos de los jugadores y las pruebas que requieran en cada momento y garantizando que tienen a su disposición el acceso a las técnicas más avanzadas en medicina deportiva. Para ello hemos hecho un esfuerzo para incorporar a nuestros servicios, especialmente en nuestra red asistencial propia -el Grupo Hospitalario HLA-, nuevas unidades de medicina del deporte y la tecnología más avanzada”, apunta.
En este sentido, resulta lógico pensar en que a cualquier estrella de la Liga Santander se le dé acceso a las técnicas más modernas para su tratamiento. Sin embargo, ¿cómo se gestiona precisamente una lesión de un jugador, que puede suponer una baja clave para un equipo?
“Los clubes priman siempre una buena recuperación a una recuperación rápida y lo que nos demandan es disponer de los medios adecuados para que los jugadores logren este objetivo”, explica Eiroa, quien explica que “el papel de ASISA es cuidar la salud de los jugadores y ayudarles a estar en las condiciones idóneas para jugar”.
Algo que ASISA extiende más allá del tratamiento o asistencia médica en su red de centro de salud, destacando su
labor formativa para fomentar hábitos de vida saludable en los futbolistas. “Los clubes trabajan cada vez más la prevención y el fomento de hábitos saludables entre sus profesionales. En este ámbito encuentran en ASISA un sólido aliado. Por eso, por ejemplo, en los últimos meses, hemos hecho un esfuerzo con algunos equipos para trasladarles
la importancia del sueño y del descanso nocturno como factor que influye de manera decisiva en el rendimiento deportivo. Lo hicimos con la plantilla de Movistar Estudiantes y lo repetiremos con algunos otros equipos”.
No se trata, por tanto, de un servicio de diagnóstico y tratamiento al uso, sino que quienes cuidan de la salud de las estrellas de la Liga Santander tratan de ampliar el espectro de acción a otros ámbitos. Sirva como ejemplo la solución ‘ad hoc’ a la que se sometió
Leo Messi en mitad del partido contra el Olympiacos la semana pasada: en el minuto 10, el argentino, propenso a los problemas estomacales, comenzó a sentirse mal y
optó tomarse un antiácido para calmar el dolor. Un simple gesto que esconde un trabajo enorme por parte del equipo médico del club y del grupo sanitario en la sombra: gracias al seguimiento exhaustivo de los problemas que arrastra ‘La Pulga’ desde hace años, se pudo
actuar a tiempo para evitar que la estrella del Barcelona tuviese algún acceso de vómitos o mareos. Y que tuviese que romper de ese modo su espectacular y saludable récord de minutos seguidos jugados.
Distribución de los clubes de la Liga Santander por grupos sanitarios.
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