Un pasillo de hospital.
Cada año, en el mes de mayo,
miles de MIR acaban su formación y son egresados al mundo laboral. En función de las plazas ofertadas hace cuatro o cinco años, según la especialidad, ese número puede variar. Tal es así que, este año, son los especialistas de
Medicina de Familia, Pediatría, Medicina Interna y Anestesiología, los que engrosarán las listas de empleo en plena desescalada contra el
coronavirus Covid-19.
Según datos elaborados por el centro de estudios CESM Granada, las especialidades anteriormente citadas son las que más médicos podrían terminar, mientras que por el contrario la formación en
Inmunología, Bioquímica Clínica, Cirugía Torácica y Farmacología Clínica son las especialidades que pueden concluir con un menor número de médicos egresados.
En el caso de Medicina de Familia y Atención Comunitaria, la especialidad que se va a encargar fundamentalmente de rastrear los nuevos casos de coronavirus Covid-19, son 1.690 profesionales los que terminan su especialidad, los cuales deberían de ser contratados como especialistas.
Una petición exigida por sindicatos y la propia OMC para asegurar una desescalada segura.
En este sentido,
Madrid, Barcelona y Valencia, las provincias más afectadas por el coronavirus Covid-19, son las que tienen un mayor número de médicos que pueden terminar su formación. En el otro extremo encontramos a
Soria, Palencia y Cuenca, tres regiones también especialmente azotadas por el virus, como las que menos MIR tienen para terminar su formación.
Se marchan
Hay que recordar que, en los últimos meses, según datos de la propia
Organización Médica Colegial (OMC), más de 2.500 médicos han solicitado el certificado de idoneidad para salir fuera de España, “aunque finalmente el número de los que emigran posiblemente sea inferior. Mientras en España
aumentan las listas de espera y los médicos de los Servicios de Salud están saturados y con cargas de trabajo insoportables”, afirma Vicente Matas, autor del estudio, que espera que los servicios de salud autonómicos mantengan a este músculo asistencial.
“Necesitamos una planificación responsable de las necesidades de médicos especialistas, para poder cubrir el importante número de plazas -aproximadamente el 40 por ciento de las plantillas de los Servicios de Salud según diferentes noticias‐ que por jubilación quedaran vacantes en los próximos diez u once años, esperemos que los nuevos MIR sean suficientes y que no emigren
en gran número a países de nuestro entorno con mejores condiciones laborales y profesionales”, prosigue el estudio.
De cara a los próximos años, los
MIR que acaban su especialidad seguirá en aumento. Si este año son 6.069 en los próximos cuatro años esa cifra aumentará gracias al aumento de plazas entre diferentes especialidades, tales como Medicina Familiar y Comunitaria (+320), Pediatría (+71), Anestesiología (+40), Cir. Ortopédica y Traumatología (+43), Dermatología (+32), Radiodiagnóstico (+28), Anatomía Patológica (+26), Urología (+26), Oncología Médica (+24), Aparato Digestivo (+24), Psiquiatría (+24), Cardiología (+22), Oftalmología (+20), Medicina Interna (+18)
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