El grupo de trabajo compuesto por ministerio y consellería lanza una serie de recomendaciones para evitar colapsos

Una de las calles afectadas por la DANA.
Una de las calles afectadas por la DANA.


3 nov. 2024 19:00H
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El grupo de respuesta inmediata sanitaria frente a la DANA, compuesto por la Consellería de Sanidad y el Ministerio de este ramo, ha celebrado este domingo su primera reunión. De este primer encuentro, surgían una seríe de directrices centradas en la prevención del riesgo epidemiólogico y el fomento del buen uso de los recursos sanitarios. De esta manera, el comité de expertos en salud pública recomienda a los afectados consultar a los profesionales si la persona está herida, con probabilidad de infección; si tiene fiebre, vómitos o diarrea; si padece enfermedades crónicas que requieran atención, o si se siente sobrepasado por estrés, nerviosismo o ansiedad.

Son solo algunas de las indicaciones recogidas en el documento 'Preguntas frecuentes sobre Salud Pública tras inundaciones’, publicado tras la reunión de la Dirección General de Salud Pública de la Generalitat, junto con el Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES) y la Dirección General de Salud Pública del Ministerio de Sanidad, la Agencia Española del Medicamento y el Instituto Carlos III.

A esta primera reunión, de carácter técnico, no han asistido ni la ministra de Sanidad, Mónica García, ni el conseller de Sanidad de la comunidad, Marciano Gómez, aunque está previsto hacer un "seguimiento" que incluya una participación de ambos en el futuro. De hecho, aunque de momento no hay nada programado en agenda, no es "descartable" un desplazamiento de la ministra a la zona más adelante, "según las circunstancias", tal y como informan fuentes ministeriales. 

Limpieza con protección


El objetivo de esta iniciativa es evaluar los posibles riesgos epidemiológicos y explicar a la población cómo debe actuar. Las medidas reflejadas en el documento señalan los aspectos que debe tener en cuenta la ciudadanía en cuanto al consumo y conservación de los alimentos y la importancia de beber y cocinar con agua potable para evutar intoxicaciones. 

Concretamente, la Generalitat recomienda no consumir alimentos que hayan estado en contacto con el agua y el barro, excepto latas y tarros de conservas herméticos. Además, no aconseja participar en las labores de limpieza a la población vulnerable. 

Asimismo, el documento afirma que no se debe manipular restos de cadáveres de animales sin protección, por lo que insta a la población a que lo notifique a las autoridades. Solo se indica usar generadores portátiles o motores fuera de las viviendas y garajes, procurando alejarlo de puertas y ventanas o rejillas de viviendas. 

También se indica lavar las manos frecuentemente con agua y con jabón y mantener limpias y cubiertas las posibles heridas. Proteger nariz, boca y ojos de salpicaduras con agua contaminada y otras sustancias es esencial, por lo que la Generalitat recomienda usar guantes y retirarlos antes de comer, usar el móvil o tocar la cara.

Para Héctor Tejero, asesor del Ministerio de Sanidad en Cambio Climático, "no es solo cuestión de más medios, sino de coordinación y de logística", por lo que insta a coordinar la solidaridad popular con unas "instituciones fuertes" que sean lo más efectivas posibles. 

Colaboración entre la Consellería y el Ministerio de Sanidad


Por su parte, Mónica García, ministra de Sanidad, ha afirmado que el Ministerio está manteniendo reuniones diarias con la Consellería de Comunidad Valenciana. Además, ha asegurado que en el Consejo Interterritorial se están coordinando las necesidades y la ayuda que todas las comunidades autónomas han ofrecido. "A nivel europeo, estamos en contacto con la OMS para apoyarnos en expertos en inundaciones en el campo de la salud pública", ha indicado.

La labor de las instituciones involucradas, según García, se está organizando en cinco grupos: detección precoz de enfermedades, control de la calidad del agua y determinación de parámetros prioritarios en las zonas afectadas, evaluación de la necesidad de vacunaciones específicas frente a enfermedades inmunoprevisibles, riesgos y medidas de control relacionados con vectores y recomendaciones ampliadas sobre seguridad alimentaria. "Nos hacemos cargo de la situación extrema e insistimos en la colaboración y la confianza como herramientas prioritarias de salud pública", ha concluido.
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