Redacción. Valencia
El Colegio de Médicos (COM) ha enviado un comunicado para "hacer constar el perjuicio personal y profesional al que están sometidos diversos compañeros cirujanos afectados por la inclusión de las prótesis mamarias de silicona PIP (Poly Implant Prothèse)".
Rosa Fuster, presidenta |
Estos profesionales, como asegura el COM valenciano, "han sido víctimas del fraude de las prótesis PIP, al igual que las propias usuarias que se las implantaron, puesto que confiaron en un producto que contaban con la pertinente autorización española y homologación por la Unión Europea". En este sentido, el Colegio de Médicos, recuerda a la sociedad que los médicos cirujanos "no son los responsables ni de fabricar, ni analizar, ni homologar ni autorizar dicho material", de forma que los cirujanos "desconocían los defectos de dichas prótesis, puesto que estaban certificadas y cumplían los requisitos de calidad necesarios". Los verdaderos autores del fraude que hicieron negocio millonario, continúa el COM en un comunicado, "son el fabricante y la certificadora".
El Colegio de Médicos "se solidariza con la ansiedad y sufrimiento de las mujeres que están pendientes de retirarse estos implantes, e insiste en el mensaje de que los médicos no han sido los que han causado el perjuicio a las usuarias, recordando que en ningún momento los cirujanos deben ser sujetos de descalificaciones o sensacionalismos".