Jaime Giner, presidente del Colegio de Farmacéuticos de Valencia.
El anuncio del
programa '
Resi-EQIFar', por el que la totalidad de la gestión de los medicamentos para residencias de Comunidad Valenciana pasará por los hospitales de la región, particularmente por el de La Fe, en la capital del Turia, “es una sorpresa total. Oficialmente, no hemos recibido notificación alguna, ni una llamada o whatsapp por parte de la Administración. Y cuando nos llegaron rumores, se negaron desde la propia Consejería de Salud Pública y Sanidad Universal”, indica
Jaime Giner, presidente del Colegio de Farmacéuticos de Valencia, a Redacción Médica.
Giner asegura que la medida es “incomprensible. Sin farmacias comunitarias la asistencia al paciente queda muy mermada”. Asimismo, consultado por Redacción Médica, opina que con este modelo de atención a las residencias se “incumple, por lo menos, el decreto de la Comunidad Valenciana 94/2010. Incumple, incluso, el convenio de prestaciones de la región. Tenemos que hacer una valoración legal, incluso a nivel de
Ley de Garantías y Uso Racional de los Medicamentos y Productos Sanitarios”, advierte.
Además, “
no hay una valoración económica del programa. Se habla de un ahorro (de unos 15 millones de euros) que no está demostrado, sin haber calculado el que se podría lograr con la participación de la farmacia comunitaria”. De hecho, considera que es “
de vergüenza y deleznable que la propia administración nos quiera utilizar para dar el servicio allá donde no llega. En aras a la defensa del paciente lo damos, pero siendo tratados como migajas”.
Por todo esto, anuncia “un
bloqueo absoluto de cualquier relación mientras no se aclare la situación”.
Abrir una guerra
El presidente de los farmacéuticos valencianos advierte de que “la propia Administración está intentando abrir una
guerra entre farmacia hospitalaria y comunitaria, cuando tal guerra no es cierta. Se está utilizando a las residencias para crearla, pero ambas farmacias deben jugar un papel fundamental en esta prestación. La Administración está mintiendo para lograr el enfrentamiento”.
Es más:
los 65 puestos de trabajo para farmacéuticos de hospital para gestionar 'Resi-EQIFar' que se crearían “son una risa”, opina. “Con este programa hacen falta más, la farmacia hospitalaría debería considerar esta oferta una burla. Ya hay hospitales importantes que no cuentan con profesionales en estos servicios de noche o fuera del horario normal. Eso está demostrado y no se contrata a nadie. Me da la sensación que les quieren comprar con esta promesa, que ya veremos si se cumple”.
Finalmente, lamenta el trato dispensado por la consejería que dirige Carmen Montón a la botica. “
Nos ha estado utilizando de manera muy sucia”, denuncia Giner. “Han tenido toda la colaboración de la farmacia comunitaria y de los Colegios que han querido. Incluso en temas como la subvención del copago de pensionistas y de personas con ingresos menores, en el que hemos puesto dinero de nuestro bolsillo para ponerlo en marcha.”
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