Los sindicatos SATSE, ELA, LAB, SME, CCOO, UGT, ESK, SAE y UTESE han convocado
tres jornadas de huelga en Osakidetza para reclamar una sanidad pública de calidad con más inversión en personal y materiales. Un anuncio que se produce después de que el Departamento de Salud Vasco no tomará ninguna medida para solventar los problemas denunciados en las movilizaciones del pasado 3 de octubre.
Según han informado los diversos sindicatos en un comunicado conjunto, las huelgas de 24 horas tendrán lugar en diferentes días en función del territorio afectado:
el 29 de octubre se celebrará en los centros de trabajo de Alava, el 5 de noviembre en los de Gipuzkoa y el 12 de noviembre en Bizkaia.
Los representantes sindicales tienen claro que es urgente pasar de las palabras a los hechos y poner en marcha soluciones que garanticen el futuro de la sanidad pública vasca. Según su parecer, son imprescindibles las siguientes medidas:
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Un incremento de la partida presupuestaria para la sanidad pública para que se equipare a la media de la UE, destinando un 25% a la Atención Primaria.
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Aumento de la plantilla, con la incorporación a la plantilla estructural de los empleos ocultos en fraude y la consolidación de trabajadores eventuales que estabilicen la plantilla y eviten la fuga de profesionales.
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Recuperación de los derechos perdidos, como las primas de jubilación anticipada o la negociación de un nuevo acuerdo regulador caducado desde el 2009.
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Medidas para garantizar la salud y la seguridad de la plantilla, tanto ante el coronavirus, como en su labor diaria: material de protección suficiente y adecuado para todas las categorías; valoración de los riesgos laborales en los distintos niveles asistenciales y adopción de medidas preventivas y de protección; evaluación de riesgos psicosociales, incluyendo los derivados de las cargas de trabajo, y adopción de medidas correctoras.
Desde los sindicatos afriman que el Gobierno Vasco no les ha dejado otro camino que el de la movilización, por lo que han tenido que recurrir a la huelga. “Ni el Departamento de Salud ni la propia Osakidetza han puesto encima de la mesa medidas tendentes a aliviar las graves deficiencias que sufre la sanidad pública vasca,
deficiencias que llevamos años denunciando”, reza el comunicado.
Para los profesionales no se trata de problemas eventuales por culpa de la pandemia sino de
deficiencias estructurales derivadas de una inversión en la sanidad pública inferior a la media europea y con una evolución decreciente en los últimos años.
"Es especialmente palpable en Atención Primaria, pero también está presente en el resto de ámbitos como hospitales y en la red de salud mental: escasez de medios humanos y materiales, sobrecarga sistemática de trabajo, altas tasas de temporalidad, agotamiento físico y emocional, recortes de derechos laborales, privatización de servicios, desprotección y descuido de la salud laboral," reclaman en el texto.
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