En País Vasco hay una población infantil (0-14 años) de 307.000 niños.
7 nov. 2016 11:20H
SE LEE EN 3 minutos
El sindicato ELA denunció la pasada semana el “deterioro” de la atención sanitaria infantil en Álava debido a la falta de pediatras y ha culpado a Osakidetza y al Departamento vasco de Salud de esta situación “caótica”. El sindicato aseguró en un comunicado que la situación en la provincia vasca “estaba colapsada”, pero esta tesitura puede extraporlarse a toda la comunidad.
La plantilla estructural de Osakidetza se compone de 318 plazas de Pediatras de Atención Primaria, 147 de Hospitalaria y 14 de Cirugía Pediátrica. Redacción Médica se ha puesto en contacto con el Sindicato Médico de Euskadi (SME), que ha confirmado que “se necesitarían al menos 470 plazas de Pediatría para asegurar la asistencia pediátrica completa a nuestra población infantil, frente a los que solo disponemos de 318 plazas lo que supone un déficit general del 33 por ciento”.
Los números salen rápido. En la comunidad autónoma del País Vasco hay una población infantil (0-14 años) de 307.000 niños y “teniendo en cuenta la distribución geográfica de la población, se necesitan 400 puestos estructurales de Pediatría en Atención Primaria”. A esto hay que añadir que cada especialista -ya sea por vacaciones, permisos o bajas- se ausenta de su puesto de trabajo 45 días (12 por ciento de su jornada anual), por lo que se necesitarían 48 médicos más. Por último, hay que decir que “esta especialidad está especialmente feminizada”, lo que quiere decir que la tasa de ausencias por embarazo, nacimiento y lactancia es superior al resto.
El sindicato médico ha denunciado que “ni siquiera las 318 plazas estructurales existentes etán cubiertas totalmente por pediatras”. Aunque no disponen de la cifra exacta, sus estimaciones rondan el 15 por ciento -unas 45 plazas- que pueden estar siendo atendidas a tiempo completo por médicos de Familia.
Las razones de este déficit pueden encontrarse en el propio sistema MIR, “que no ofrece en número suficiente, puestos de formación en Pediatría”. El SME ha denunciado además que Osakidetza “no ofrece soluciones parciales alternativas, como por ejemplo permitir la prolongación voluntaria de la vida laboral de los pediatras que deseen seguir en las consultas y estén en condiciones físicas de hacerlo, o bien ofrecer la posibilidad de prolongar voluntariamente la jornada cuando sea necesario y no exista posibilidad de contratar sustitutos”.
Por último, otra de las razones de esta deficiencia es, a juicio del sindicato, la situación lingüística, pues “siendo Euskadi una comunidad laboralmente atractiva, la ‘importanción’ de pediatras foráneos tiene una dificultad suplementaria.
Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.