El nivel de satisfacción de sus usuarios es alto y optan mayoritariamente por ellos mediante la libre elección

Los pacientes prefieren los hospitales concesionados
Rodolfo Antuña, delegado de la Administración de Concesiones de Gestión de Servicio Público de Asistencia Sanitaria Especializada.


6 abr. 2016 14:00H
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POR REDACCIÓN
Los pacientes prefieren los hospitales concesionados. Esta es una de las conclusiones obtenidas en la comparecencia de Rodolfo Antuña, delegado de la Administración de Concesiones de Gestión de Servicio Público de Asistencia Sanitaria Especializada de los hospitales de Collado Villaba, Valdemoro, Móstoles-Rey Juan Carlos y Torrejón, durante su comparecencia en la Comisión de Sanidad de la Asamblea de Madrid. 

Parece que se cumple así el argumento, tantas veces empleados por los representantes políticos, por el que al paciente no le importa cómo se gestiona un centro, sino recibir una atención de calidad.

Y los datos – correspondientes a 2014- que explican esta elección son, por ejemplo, el alto nivel de satisfacción alcanzado por estos hospitales, superiores al 90%; la espera media para la primera consulta de Atención Especializada, situada en valores entre el 8-10, frente a los más de 15 del resto de centros; el número de reclamaciones por cada 10.000 actos médicos, en torno a las 3 o 4, lejos de las 15, 28 o incluso 40 de otros centros. 

A ello se suma, ha añadido el delegado, que estos hospitales son reclamados por los ciudadanos a través de la libre elección "de forma mayoritaria". Como ejemplo, Antuña ha destacado que, entre 2014 y 2015, han crecido en más de 5.500 las citas entrantes en el Hospital de Villalba; o en más de 7.000 en el Hospital Rey Juan Carlos.  

Información toda ella que, según ha comentado Antuña a los parlamentarios, está en su mayoría disponible en la Memoria del Servicio Madrileño de Salud y el Observatorio de Resultados del Servicio Madrileño de Salud.

En su intervención también ha detallado que estos hospitales se someten a auditorías asistenciales y no asistenciales. En concreto, en 2015 se realizaron un total de 19 auditorías sanitarias, evaluándose criterios como la continuidad asistencial, la actividad sanitaria o la facturación intercentros. Están previstas, además, en torno a diez para este año, analizándose aspectos relacionados con los recursos humanos, la seguridad alimentaria o la calidad de la información al paciente.

Respecto a las auditorías de carácter no sanitario, Antuña ha explicado que “no se detectaron incidencias de gravedad en ningún caso”, de hecho las incidencias más destacadas están relacionadas con la temperatura de las comidas.
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