Julio García Comesaña, consejero de Sanidade.
La
Xunta de Galicia ya ha puesto fecha para que los
influencers tengan prohibido por ley hacer publicidad o propaganda de las oficinas de Farmacia. Será antes del segundo semestre del año 2024, pues el Gobierno regional prevé que el proceso de alegaciones y el visto bueno de sus respectivos centros directivos llegará durante los primeros seis meses del año. “La previsión es que pueda estar
aprobado antes de finalizar el primer semestre del año 2024, entrando en vigor a los 20 días naturales de su publicación en el Diario Oficial de Galicia (DOG)”, confirman desde la Conselleria de Sanidade a
Redacción Médica.
Se trata, tal y como argumentan los
farmacéuticos, de un plazo razonable. “Galicia en muchas cosas es pionera y en esto también lo vamos a ser. ¿Si llega tarde la medida? Siempre y cuando se apruebe no será ni tarde ni pronto, porque lo importante es que llegue”, argumenta a este diario
Paula Briones, miembro de la Junta de Gobierno del Colegio Oficial de Farmacéuticos de A Coruña (
COFC). Y es que, tal y como añade la farmacéutica, el
impacto de los influencers es algo “que se ha desmadrado, que no está regulado y que no hay un control” sobre ellos. “No es que pensemos que los influencers estén ejerciendo un papel que no es el suyo, sino que
hay un peligro de salud detrás de todo esto”, remarca Briones.
Concretamente, lo que el anteproyecto de ley gallego señala es el
veto a que los influencers hagan promoción de las oficinas de Farmacia: “El proyecto de decreto contempla que no se podrán realizar actividades publicitarias a través de personas de relevancia científica, médica, cultural o social, así como a través de colaboraciones con influencers, o cualquier otra persona con impacto mediático”. Lo que sí regulará la futura norma es la
señalización, información, publicidad y actividades de promoción que lleven a cabo las oficinas de Farmacia y boticas anexas.
Si bien el proceso normativo aún se encuentra en su fase inicial, desde la
Conselleria de Sanidade rechazan que legislar sobre esta cuestión suponga una
invasión de competencias, pues, según afirman, se trata de una competencia gallega recogida en su
Estatuto de Autonomía. “No es previsible que este proyecto suscite problema competencial alguno”, indican. “En este sentido, se permite expresamente que en las páginas web y redes sociales de las oficinas de Farmacia se pueda desarrollar la venta a distancia de productos distintos de los
medicamentos o productos sanitarios, que no precisen prescripción médica o veterinaria y no sean financiados, así como facilitar consejos farmacéuticos y educación sanitaria, e información sobre las funciones y servicios de la Farmacia”, añaden desde la Conselleria.
Medicamentos sin “prácticas comerciales”
Uno de los argumentos a los que se sujetan desde el Colegio Oficial de Farmacéuticos de A Coruña es que “
el medicamento no es un bien de consumo más, por lo que no puede estar sujeto a prácticas comerciales”. Y es que desde el COFC sentencian que, para garantizar la calidad del fármaco, tiene que estar regulado y “
únicamente aconsejado por expertos en medicamentos, que somos los farmacéuticos”.
Es por ello que rechazan cualquier tipo de incursión de los influencers en esta práctica publicitaria, debido a que “no son personal sanitario, y por lo cual, no están peparados ni capacitados para dar consejos sobre medicamentos”. Pero, esta ‘prohibición’ también entraría la realización de
propaganda de las oficinas de esos profesionales, ya que recalcan que una actividad puede terminar incurriendo en la otra. Es más, Briones añade que el propio producto farmacéutico tiene el “problema” de que si se usa bien “puede curar mucho y ayudarnos con las
enfermedades”, pero que un uso inadecuado puede llegar a hacer “daño”. “Se estima que un 5-10 por ciento de los
ingresos hospitalarios y un 30 por ciento de las
urgencias hospitalarias se deben a un mal uso de medicamentos con sus respectivos efectos adversos”, incide.
“No es necesario adquirir medicamentos por redes sociales. La
red española de Farmacias es suficientemente amplia como para que cada ciudadano tenga cerca una oficina”, recalca Briones, enfatizando que la venta de medicamentos solamente debe hacerse desde las farmacias. “Somos los responsables desde su fabricación, logística de distribución y dispensación. En toda la cadena velamos por la conservación. Las promociones y ofertas solo incitan al mal uso y a un consumo incontrolado, y lo único que hace es que el paciente se automedique”, zanja.
Aragón, la siguiente en dar el paso
El
Gobierno aragonés será el siguiente Ejecutivo autonómico que
regulará la publicidad de las oficinas de Farmacia, y es que la comunidad ya dio un paso relevante el pasado mes de noviembre en cuanto a la profundización de su
legislación de la publicidad sanitaria, sacando a información pública su futura ley que regule la actividad. La intención del Ejecutivo autonómico de Aragón es que publicitar un producto o espacio sanitario deberá contar con el
visto bueno de los colegios profesionales pertinentes. No obstante, desde el Gobierno no han especificado cuáles son los
plazos que manejan y, por el momento, rechazan hacer cualquier tipo de valoraciones.
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