Equipo de la Unidad de TEC.
El pasado mes de enero de 2019, el Hospital de Mérida iniciaba la actividad de la nueva Unidad de Terapia Electroconvulsiva en el
Hospital de Mérida. Desde su apertura, ha tratado a un total de
quince pacientes consiguiendo buenos resultados clínicos, según ha informado José María Vergeles, consejero de Sanidad de la Junta de Extremadura.
Vergeles ha felicitado a los profesionales de esta Unidad y ha defendido la necesidad de
protocolizar la aplicación de este tipo de tratamiento en los casos en que esté indicado y extenderlo a otras áreas de salud de la región.“Siempre se estudia previamente en una comisión médica y se hace contando con un anestesista y un psiquiatra de referencia que prescribe el tratamiento”, ha señalado el consejero de Sanidad, haciendo hincapié en “desmitificar” antiguos usos que ya no tienen nada que ver.
Esta terapia, que consiste en la
inducción de una convulsión tónico-clónica generalizada a través de la administración de un estímulo eléctrico en la superficie craneal, previa anestesia general del paciente y relajación muscular, ha sido "un tratamiento denostado y
estigmatizado durante años", según la coordinadora de Salud Mental del Área de Mérida, Virginia Gajardo.
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La TEC constituye un procedimiento terapéutico eficaz, seguro y de acción rápida.
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Gajardo señala que esto problablemente se deba al "
mal uso y las inapropiadas condiciones de aplicación utilizadas en sus orígenes, así como por la falta de información veraz acerca de sus mecanismos de acción, efectos clínicos y posibles efectos adversos".
No obstante, la TEC está indicada en el
tratamiento de enfermedades psiquiátricas graves resistentes a otras modalidades de tratamiento ya que constituye un
procedimiento terapéutico eficaz, seguro y de acción rápida.
Por ejemplo, en pacientes con
esquizofrenia refractaria, en casos de importante
desorganización conductual o en
episodios depresivos mayores con síntomas
psicóticos y
catatonias. También puede utilizarse en personas en las que exista contraindicación o intolerancia para el uso de fármacos.
La implantación de esta Unidad, la única de este tipo que existe en Extremadura, se ha llevado a cabo bajo la coordinación de
Virginia Gajardo, gracias a la estrecha colaboración y el trabajo conjunto realizado por los profesionales de los
servicios de Psiquiatría y Anestesiología de este hospital extremeño.
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