Argimon: "Es muy difícil cogobernar con el actual Consejo Interterritorial"

“Es muy difícil cogobernar en el Consejo Interterritorial”, asegura el conseller de Salut de Cataluña, Josep Maria Argimon. El conseller afirma que ve “bien mantener una reunión periódicamente para ver cómo evoluciona la pandemia”, pero que estas reuniones no favorecen la cogobernanza.

Argimon critica el procedimiento utilizado en las reuniones, en las que las 17 comunidades autónomas dan a conocer su posicionamiento y después no hay oportunidad para matizar o comentar las posturas de los demás. Por ello, el conseller a la pregunta de Redacción Médica destacando que “hemos intentado no politizar el Consejo Interterritorial y se han aprobado las decisiones por mayoría”.

Sin embargo, el conseller sostiene que ha tenido “discrepancias técnicas” y opina que otras regiones “han utilizado el Consejo Interterritorial como una herramienta política”. Argimon se ha expresado de esta forma en la presentación del informe ‘Las relaciones intergubernamentales del Estado autonómico durante la crisis sanitaria del Covid-19’, elaborado por el Institut d’Estudis de l’Autogovern y presentado por su director, Joan Ridao. Argimon ha destacado que estará “vigilante a que no haya la tentación de recentralización” utilizada durante la pandemia.

“De conferencia sectorial a muro vertical”

Más contundente se ha mostrado Ridao, que considera que el Consejo Interterritorial ha pasado de ser una “conferencia sectorial, un facilitador de acuerdos, información recíproca a un muro vertical donde se han impuesto medidas”. El director del Institut d’Estudis de l’Autogovern señala que este órgano ha dejado de realizar recomendaciones a imponer medidas coordinadas de obligado cumplimiento.

“El viejo derecho sanitario autonómico ha sido claramente desplazado por la normativa estatal”, añade. Según Ridao el Consejo Interterritorial ha tenido un funcionamiento regular y cooperativo, pero ha reducido el margen de las CCAA y ha sido un mecanismo opaco.

A pesar de hacer un balance razonablemente positivo de la relación de la participación de las comunidades autónomas en los órganos en los que asistía, Ridao manifiesta que “de cara a futuro se debería sustraer ese poder de decisión y capacidad de imposición”.