El presidente regional, Emiliano García-Page.
El presidente de la Junta de Castilla-La Mancha,
Emiliano García-Page, se ha referido este martes extensamente a asuntos sanitarios durante una rueda de prensa en la que ha valorado su
primer año de Gobierno del PSOE con el apoyo externo de Podemos. Entre otros asuntos, ha revelado que su gobierno ultima la
Ley de Participación Ciudadana en Sanidad, que se está negociando con la formación morada, y que "se tramitará en próximos meses".
Page ha defendido además su
gestión de las listas de espera, reseñando que “al cumplir un año de Gobierno hay 4.143 pacientes menos que antes de ser presidente”. Ha destacado también que Sanidad ha puesto en marcha “un sistema transparente de seguimiento de las listas de espera” y ha criticado al anterior ejecutivo, presidido por María Dolores de Cospedal, por gastar en seis meses la mayor parte del presupuesto anual previsto para derivaciones.
Además, ha señalado que las listas de espera “a veces obedecen a faltas de especialistas, déficit de gestión y a falta de tecnología” y, en este sentido ha destacado la importancia del plan de renovación tecnológica puesto en marcha y dotado con 26,4 millones de euros.
Por otro lado, ha reiterado que, además del de
Toledo, los hospitales de
Talavera y
Cuenca se van a incorporar al carácter universitario, “de manera que esos hospitales podrán dar salida a los alumnos de medicina y arraigar a los profesionales”, que se terminen de formar en nuestro sistema sanitario.
Hospital de Guadalajara
Por otro lado, Page se ha referido al
convenio sanitario con Madrid, que Castilla-La Mancha quiere mantener, “pero revisándolo”. En este sentido, el presidente castellanomanchego ha restado validez al “ultimátum” dado por Madrid, según el cual el convenio finalizará en agosto si Castilla-La Mancha “no cumple sus compromisos”, en palabras de la presidenta madrileña,
Cristina Cifuentes. Page se ha referido a la reunión que mantendrá en los próximos días con ésta y en la que le trasladará la posición de su gobierno, favorable a circunscribir el convenio a la provincia de Guadalajara.
Sin embargo, incluso ese convenio reducido tendría una vigencia limitada. Según el presidente regional la necesidad de atender en Madrid determinadas especialidades “se va a acabar” a la vuelta de unos años. “En cuanto esté acabado el Hospital de Guadalajara, entre el 75 y el 80 por ciento de las prestaciones que se tienen que hacer fuera se harán en Guadalajara, especialmente medicina nuclear y cirugía pediátrica”, ha adelantado.
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