Redacción. Valladolid
El consejero de Sanidad, Antonio Sáez Aguado, ha comparecido este viernes ante la Comisión de Sanidad de las Cortes de Castilla y León para informar sobre la ejecución del plan de medidas puesto en marcha en abril para reducir las listas de espera quirúrgica. Las iniciativas que se están llevando a cabo desde entonces –entre ellas un aumento de plantillas y la reactivación de conciertos- han permitido reducir en 3.217 el número de pacientes en espera, según los últimos datos oficiales a 30 de junio, priorizándose siempre los casos más graves y manteniendo la demora media por debajo del conjunto del Sistema Nacional de Salud desde que se contabilizan estos datos.
Antonio Sáez Aguado. |
Antonio Sáez Aguado ha reconocido que, a pesar de ese descenso en el número de pacientes en espera, la demora media se ha ido incrementando en el último año, un dato que además es muy variable según hospitales. Los motivos de este aumento han sido, como ya se conoce, la eliminación de la autoconcertación -las denominadas ‘peonadas’- y la práctica eliminación de los conciertos quirúrgicos (medidas aprobadas en el Plan de Ajuste 2012).
A su juicio, lo más importante ante estos datos, y a la espera de que las medidas puestas en marcha continúen mejorando la situación, es transmitir tranquilidad a los usuarios de la sanidad pública, ya que se están tomando todas las medidas posibles para reducir esas demoras y los casos más graves se están atendiendo de manera prioritaria en todos los hospitales.
Asimismo, el consejero ha reiterado la necesidad de priorizar la atención de los casos graves, en particular de los procesos oncológicos y la cirugía cardíaca, para asegurar en ellos una demora máxima de 30 días como en la actualidad.
En este sentido ha anunciado que la información sobre listas de espera incorporará datos sobre tiempos de intervención en función de la gravedad de los casos y las prioridades clínicas. “Los datos globales de demora media no son suficientes y no explican bien la situación de las demoras pues incluyen, con el mismo peso, un caso de cáncer de colon y un juanete; por eso facilitaremos, además, información desagregada de acuerdo con las prioridades clínicas de intervención”.
El consejero ha destacado que el número de intervenciones realizadas en jornada ordinaria se ha incrementado en 2013 y que se ha logrado aumentar el número de quirófanos en funcionamiento -159 de media diaria entre enero y junio, cuando el balance de 2012 fue de 135-. En el caso de la cirugía mayor ambulatoria, el objetivo es que al acabar este año el 67,9 por ciento de las operaciones realizadas en los 25 procesos más frecuentes sean sin ingreso. Por último, también se pretenden reducir las intervenciones quirúrgicas suspendidas, que el año pasado fueron 5.860.
Finalmente, el consejero ha informado de que algunas de las medidas adoptadas ya han comenzado a tener efectos positivos (como por ejemplo la reducción de 3.217 pacientes en espera en el segundo trimestre de 2013) y continuarán en los próximos meses pese al incremento estacional que se produce habitualmente en los meses veraniegos. “Trabajamos para que al finalizar 2013 podamos recuperar las cifras de hace un año en el que la demora media se situaba en 73 días” ha señalado.