El consejero de Sanidad de Castilla y León, Alejandro Ramos.
El Boletín Oficial de Castilla y León ha recogido este miércoles la aprobación del nuevo
Plan Estratégico de Investigación e Innovación en Salud de Castilla y León. Este proyecto, indicado para el periodo de 2023-2027, contiene novedades para los trabajadores de la salud de la comunidad autónoma. La Consejería que lidera
Alejandro Vázquez Ramos establecerá un
sistema de bolsa de horas o productividad para fomentar la investigación sanitaria y creará la
categoría profesional de investigador clínico.
El objetivo de este plan es "desarrollar un marco de actuación plurianual, participativo, transversal, accesible y alineado con el contexto estratégico actual", y que afecte a toda la población de Castilla y León, desde los profesionales de salud hasta los ciudadanos de a pie. El Ejecutivo regional lo considera necesario ya que la
investigación y la innovación
"son pilares fundamentales" para abordar los desafíos que afectan a la comunidad: el
envejecimiento de la población, la
cronicidad, la
dispersión geográfica y su heterogenidad, entre otros. El proyecto "responde a las necesidades actuales y futuras de la población y para garantizar una atención sanitaria de calidad y eficiente en la región", sostienen.
Ayudas a la investigación sanitaria
Dentro de la estrategia de implantación del plan, hay un área dedicada específicamente al talento. En él, hay dos programas:
'refuerzo', para "detectar, generar y atraer el talento en los escenarios en los que se ejecuta la I+i en salud en Castilla y León, así como fortalecer las oportunidades de
formación, capacitación y desarrollo profesional en este ámbito, que faciliten a los distintos profesionales alcanzar su máximo potencial", y
'reconoce', para "crear un ecosistema de I+i en salud que permita
retener y estabilizar el talento y ponga en valor la actividad de I+i en salud en las organizaciones y a lo largo de toda la carrera profesional".
Entre sus medidas destaca el fomento a las actuaciones que permitan a los profesionales la
dedicación de un tiempo específico a la investigación e innovación mediante el establecimiento de un sistema de bolsa de horas o productividad. Para comprobar su cumplimiento se hará un registro de tiempo dedicado a la investigación por servicio o centro de salud. Además, se creará la
categoría profesional de investigador clínico, como marca la
Ley de Ciencia aprobada en 2022. En este sentido también se contabilizará el número de trabajadores estabilizados según los mecanismos de esta norma. Ambas acciones
darán comienzo en 2025, continuando en 2026 y 2027, según lo establecido en el plan.
Por otra parte, el Gobierno castellano-leonés dará "apoyo" a la Universidad en los estudios de postgrado, máster y doctorado, buscando que haya una "potenciación" de esta
formación entre los profesionales del sistema de salud. En el seguimiento de esta iniciativa, que se pondrá en marcha en 2025, se computará cuántos sanitarios realizan estos estudios anualmente.
Además de estas medidas directas a los investigadores, la comunidad promoverá la
divulgación de la actividad investigadora con el objetivo de "reforzar la cultura de la I+i en salud". También impulsará la
ciencia para la ciudadanía, alineando los procesos de investigación e innovación con los valores, necesidades y expectativas de la sociedad, incorporando a los actores clave del sistema.
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