El Sespa reduce a tres sus gerencias pero crea el interlocutor territorial

El nuevo mapa sanitario del Principado de Asturias cambiará por completo su estructura directiva. Así lo ha reconocido la consejera de Salud, Concepción Saavedra, en respuesta a la diputada autonómica Covadonga Tomé, portavoz del Grupo Mixto, en la Comisión de Salud.

Durante su intervención, ha adelantado que el decreto del nuevo mapa sanitario “está en tramitación, en un momento de reflexión”. Como novedades, Saavedra ha anunciado que existirá un “interlocutor territorial” en los hospitales periféricos, ya que el nuevo modelo se estructura en tres grandes áreas de gestión, en lugar de las ocho en las que está dividido.

Reestructuración completa de las estructuras directivas sanitarias en Asturias

“Tenemos un mapa sanitario de hace 40 años, debe cambiar el mapa y quién lo gestiona”, ha puntualizado. Aun así, ha hecho hincapié en que la estructura debe ser más pequeña desde el punto de vista estratégico y más grandes desde el punto de vista de la coordinación. “Va ha haber un cambio que va a afectar al Sespa y a la Consejería, habrá una reestructuración completa de cómo se dirige la salud en Asturias”, ha sentenciado.

El objetivo de este cambio, según Saavedra, “es dar una mejor respuesta a los ciudadanos y ser más ágiles”. “Vamos a racionalizar las estructuras directivas”, ha afirmado.

Además, ha señalado que la Atención Primaria, la salud pública y la salud mental “tendrán un papel relevante en la estructura directiva de las áreas”. La Consejería buscará reforzar la dirección de la primera de ellas, aparte de conseguir que la salud pública se integre en la atención sanitaria. Asimismo, ha adelantado que se creará una nueva estructura de la red de salud mental dentro del modelo comunitario, “todo ello con el objetivo de potenciar la accesibilidad, aumentar la seguridad del paciente y fortalecer los hospitales comarcales”.

Igualdad en puestos de difícil cobertura 

En cuanto a una pregunta de Tomé sobre las desigualdades en los puestos de difícil cobertura, la consejera ha insistido en que “hay unos criterios acordados entre el Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas en los que se abordan diferentes incentivos”. Aun así, ha añadido que se creará un decreto en el que se definirán cuáles son, cómo van a ser declarados de difícil cobertura, la incentivación de cada uno y cómo se va a garantizar la equidad.

También se ha puesto encima de la mesa de la Comisión la campaña #DormirSinPastillas, lanzada por la Consejería de Salud y el Sespa. Esta iniciativa, tal y como ha expuesto Saavedra, se trata de una acción en la que se busca mejorar la prescripción de las benzodiacepinas para tratar el insomnio. “Se ha demostrado que este psicofármaco no tiene efectos curativos, por lo que no debe convertirse en un tratamiento crónico”, ha señalado.

Sin embargo, el debate ha girado en torno a la confidencialidad, ya que, según los seis diputados populares que pidieron la comparecencia de la consejera, “es una campaña publicitaria que ha traspasado los límites de la legislación en materia de protección de datos”. Estas acusaciones surgen de que el Servicio de Salud del Principado envió cartas a pacientes que toman dichas sustancias, como parte de la iniciativa. “El problema es que esta campaña es nominativa y se utilizan datos confidenciales de las historias clínicas, el médico de Atención Primaria no puede facilitarlos para este fin”, ha indicado Pilar Fernández, portavoz sanitaria del PP asturiano.

En defensa de la medida, la consejera ha asegurado que dicho proyecto se ha diseñado con “garantías adicionales para asegurar la confidencialidad de los pacientes”. “Han sido cartas individualizadas enviadas por los médicos de Primaria, en ningún momento se compromete la privacidad”, ha argumentado.