José María Fernández y Miguel de la Fuente.
La
profesión médica es tan cotidiana como enigmática para una inmesa parte de la ciudadanía. Cuestiones como las guardias, la remuneración, las vacaciones o el trato que reciben los propios sanitarios en su día a día son fruto de muchos bulos y mitos que han alcanzado a gran parte del imaginario colectivo. Es por ello que
varios sanitarios han denunciado la
desinformación que existe al respecto, especialmente en torno a preguntas concretas que se repiten periódicamente incluso en sus entornos familiares y amistosos, que conocen de cerca las trabas personales y laborales ligadas a la profesión que experimentan los facultativos.
Las
guardias de 24 horas son uno de los puntos qué más controversia generan acerca de la
profesión médica. Pese a que la mayoría de la población es consciente de que los facultativos realizan
jornadas laborales de días enteros de duración, también existe un gran
desconocimiento acerca de las mismas, especialmente en cuanto a su
remuneración o a la
dinámica de trabajo a la que se somenten estos profesionales durante las mismas.
A la hora de decantarse por las preguntas más absurdas que le han hecho sobre estas jornadas médicas, José María Fernández, especialista en
Medicina Interna y secretario del
grupo de insuficiencia cardiaca y fibración auricular de la Semi, recuerda que han llegado a consultarle si "realmente se pasa tan bien como en las series" o "de dónde se sacan las ganas de trabajar sin descanso". Él mismo ha comprobado que
"se desconoce todo" sobre las guardias, desde su mecánica hasta lo que supone "que te despierten en medio de la noche sin saber la gravedad del motivo por el que te han despertado", expone.
Desinformación sobre la retribución de las guardias
También ha identificado bastantes dudas por parte de la ciudadanía en cuanto al
pago de estas horas extraordinarias, ya que tal y como han comentado varios facultativos en X (antiguo Twitter), popularmente se piensa que su pago oscila los 1.300 euros y que al realizarlas se acumulan varios días de descanso. En palabras de Fernández, "mucha gente cree desde fuera que merece la pena hacerlas, pero si pudiéramos dejaríamos de hacerlas en la mayoría de los casos, porque la retribución no compensa el desgaste que suponen", sostiene.
"Mucha gente cree que merece la pena hacer guardias, pero si pudiéramos dejaríamos de hacerlas en la mayoría de los casos, porque la retribución no compensa el desgaste que suponen".
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Pero, ¿por qué hay tan poco conocimiento sobre este tema de puertas para afuera del SNS? Para el propio Fernández, la causa principal es la
falta de divulgación al respecto por parte de la propia profesión médica. Él mismo recuerda cómo algunos de sus pacientes han pensado que las guardias se realizaban "por voluntad propia" y de manera voluntaria. Si compara a los sanitarios con otros servicios esenciales, el internista observa que éstos tienen "otro tipo de reconocimiento" no sólo a nivel social, sino también en el plano económico. "En otros servicios públicos,
este tiempo se contabiliza para la jubilación, cosa que en la profesión médica no ocurre", explica.
No obstante, es optimista respecto al punto de vista de las nuevas generaciones de sanitarios: "Antes se normalizaba incluso la falta de libranzas tras la guardia, y parecía que cuanto más se sufría mejor", recuerda. Sin embargo, él mismo observa que "ahora se está implementando más conciencia del desgaste que supone en el día a día y la
poca valoración tanto social como económica que tienen las guardias", sostiene.
Libranzas tras las guardias médicas
Entre esas nuevas generaciones a las que alude el internista se encuentra
Miguel de la Fuente, R3 de
Radiología. Aludiendo a las libranzas tras las
jornadas de 24 horas, se autodenomina como un verdadero "afortunado", ya que en su Servicio le permiten disfrutar de dicho descanso. No obstante, asegura que en muchos otros centros
"la libranza es, cuanto menos, ciencia ficción". Sin embargo, al igual que Fernández, ha observado que
la concepción de la sociedad es muy diferente: "La gente piensa que estamos de guardia 24 horas y luego libramos dos o tres días, o que hacemos unas cuantas guardias seguidas y estamos 12 o 14 días sin ir a trabajar". El problema de raíz, para este radiólogo, es una
"infantilización de la población" que hace que el
Sistema Nacional de Salud (SNS) haya pasado de ser "una necesidad a un derecho" para muchos de sus usuarios, y que por tanto un amplio porcentaje de los pacientes piense "que la sanidad es gratuita y sus recursos materiales y humanos son inagotables", reafirma.
"La gente piensa que estamos de guardia 24 horas y libramos dos o tres días o que hacemos unas cuantas guardias seguidas y estamos 12 o 14 días sin ir a trabajar".
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Triajes, antibióticos y bajas, grandes desconocidos fuera del SNS
Este escenario también es causante, en su opinión, del desconocimiento respecto a otras cuestiones de la Medicina como el
triaje que se lleva a cabo en los
servicios de Urgencias: "El triaje funciona según la gravedad, no según el orden de llegada. La gente tiene una idea muy equivocada sobre su funcionamiento", sostiene el residente.
Otra razón de desinformación que identifica entre sus pacientes está directamente relacionada con el
consumo de antibióticos, ya que "muchas personas desconocen cuándo hay que recetarlos y la verdadera forma en la que actúan en nuestro organismo", recalca. Respecto a un tema de actualidad inmediata como es la
concesión de bajas laborales, de la Fuente sostiene que muchas personas que entran a consulta verdaderamente "desconocen las razones por las que se puede remitir una baja médica y aquellas por las que no", concluye.
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