Un médico de Familia se manifiesta sobre las guardias.
Muchos son los facultativos que en los últimos meses han expuesto sus
quejas en redes sociales por lo que les suponen las guardias de 24 horas, un sistema que puede resultar incluso peligroso para profesional sanitario y para paciente que acude en busca de asistencia. De hecho, esta semana se ha conocido que un
médico británico del NHS ha sido suspendido por trabajar 24 horas sin descanso sin avisar, con el riesgo que eso suponía para los pacientes.
En esta línea de advertir de las consecuencias que suponen estas jornadas continuadas sin descanso se ha manifestado un médico de Familia
en su perfil en Twitter, donde "desde el insomnio de saliente post-guardia" admite que "las
guardias nos quitan salud", y confiesa que abre hilo en busca del sueño que le permita descansar.
"Te levantas nauseoso, mareado y con 22h de falta de sueño para atender a su paciente nº 28 de una guardia infernal"
|
Según explica, realizan guardias para una atención continuada de pacientes, para cumplir el programa formativo o contrato y para poder tener un sueldo cómodo a final de mes. "Estas guardias, en su mayoría, duran 24h. Son
24 h en las que cuentas con no dormir y parar solo para comer y cenar. Son 24h de trabajo ininterrumpido en las que te sientes mal por ir 5 min a cargar y aguantas. A las 3.00 o las 4.00
llevas unas 20 horas trabajadas, mas 2 h despierto antes de entrar a trabajar. Si tienes suerte te puedes echar 30-90 min a intentar dormir. Tras lo cual
te levantas nauseoso, mareado y con 22h de falta de sueño para atender a tu paciente nº 28 de una guardia infernal", relata en su perfil social.
Y ese paciente puede ser un probable infarto, una víctima de una agresión, un ictus, una intoxicación, un episodio de ansiedad o un accidente de tráfico, situaciones en las que en el estado previo que ha relatado
pueden cometerse fallos, pedirse pruebas innecesarias o dejarse de pedir las que sí harían falta. "Se te escapan datos de alarma, alteraciones en las analíticas, cambios en los electros o imágenes en las radiografías", admite.
Entre compañeros "nos pisamos"
Esto provoca que al cambiar el turno, los compañeros de la mañana "en su frescura de venir de dormir critican que hay pacientes sin ver, pacientes mal vistas o mal orientadas,
muchos pacientes sin resolver, pruebas sin pedir", porque además "no nos cuidamos entre compañeras, nos pisamos", lamenta.
En su opinión, sale de guardia "con el ánimo por los suelos o pasando de todo por mantener un mínimo autocuidado" e "intentas dormir al llegar a casa tras darte una ducha", pero "te levantas horas después,
desorientado, de nuevo nauseoso, con diarrea, mareo" y comiendo a las 17.00 de la tarde. Por la noche, además, cuesta conciliar el sueño pensando que "al día siguiente irás a trabajar con 3-4h de sueño y, lo mismo, tienes guardia de nuevo".
El médico explica que hay compañeras que
han tenido que dejar de hacer guardias por salud, física y emocionalmente, ya que el efecto de las guardias provocaba migrañas, crisis epilépticas o estados de ansiedad, además del sentimiento de culpa por dejar de hacerlas y saber que los
compañeros tendrán que asumir esa carga. "Y no se cuida a las que no pueden realizar las guardias ni a quienes asumen esta carga extra", añade.
"No puedo permitirme no hacerlas"
A esto se le suma el sentimiento de que "
ese sueldo que te permitía poder compartir piso con otras 2 o 3 personas y poder viajar una vez al mes a ver a tu familia
se va a ver muy mermado, pasando a cobrar el sueldo base de 1050 euros brutos al que quitarle los descuentos".
Su reflexión termina admitiendo que escribe este hilo por el insomnio que "claramente
repercutirá en mi atención a pacientes mañana y al trato a compañeras (no podré seguir con las master-class de
twerking que les estaba dando en momentos de pocos pacientes, por aquello de cuidarnos y reír)". De manera que ahí está el médico, "
enfermo en cada guardia. Pero no puedo permitirme no hacerlas", sentencia.
Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.