MADRID, 6 (EUROPA PRESS)
Investigadoras del grupo Methodological Applications and Social Challenges Group (MASCH) de la Universidad Loyola han publicado un estudio científico en el que evidencian que los jóvenes que consumen cachimba se alimentan y duermen peor.
La investigación, publicada en la 'Revista Española de Salud Pública', ha analizado una muestra de jóvenes estudiantes universitarios con el objetivo de analizar la relación entre el uso de cachimba, el estilo de vida (alimentación, actividad física y sueño) y el malestar psicológico.
Para realizar el trabajo, los expertos estudiaron a 825 estudiantes de la Universidad de Huelva, seleccionados por muestreo aleatorio, a los que se les tomaron datos que posteriormente se les realizó un análisis estadístico.
Los jóvenes a los que se les hizo el estudio tenían entre 18 y 25 años y eran estudiantes universitarios. Las preguntas que se les hizo fueron relativas al consumo de la cachimba, el malestar psicológico, la alimentación, la actividad y el sueño.
De los jóvenes encuestados, el 33 por ciento admitieron haber consumido cachimba en el último mes de los cuales, aunque las diferencias no fueran estadísticamente significativas, se observó mayor puntuación de malestar psicológico en los que habían consumido.
Al mismo tiempo, se han detectado diferencias significativas en la adherencia a la dieta mediterránea, siendo los consumidores de cachimbas menos adeptos a la sana alimentación. Además, esta muestra que había consumido cachimba en el último mes presentó un número significativamente menor de horas de sueño, aunque sí una mayor frecuencia semanal de actividad física intensa, lo cual podría asociarse con enfermedades metabólicas y/o respiratorias a largo plazo.