MADRID, 16 (EUROPA PRESS)
Más del 73 por ciento de las mujeres españolas mayores de edad ha visto mermada su calidad de vida por culpa del dolor físico, estando dos puntos por debajo de la media mundial (75%), pero superando en más de siete puntos a los hombres españoles que admiten la misma circunstancia (66%), según el Barómetro del Dolor 2020 de Voltadol, informe anual promovido por GSK Consumer Healthcare.
Coincidiendo con el Día Mundial del Dolor, que se celebra este sábado, el Barómetro del Dolor 2020 de Voltadol pone de manifiesto que para un 85 por ciento de las mujeres adultas españolas, el dolor causa un impacto negativo en su día a día, frente a un 80 por ciento de hombres.
Así, cuatro de cada 10 encuestadas que confirman sentir dolor físico reconocen que esta circunstancia termina por condicionar su vida diaria hasta el punto de definir lo que hacen o cómo se sienten. Es por ello que un 79 por ciento de ellas desearía poder controlar mejor esta afección física.
Sin embargo, son menos las mujeres que buscan consejo médico de un profesional de la salud en comparación con los hombres. Tan solo un 40 por ciento de ellas acude a un especialista, frente a casi la mitad de los hombres (48%) que sí lo hace. Además, un 31 por ciento de las encuestadas afirma que, en ocasiones previas en las que acudió a un doctor para hablar de sus dolencias físicas, sufrió una experiencia negativa. El mismo porcentaje de mujeres admite que se siente en un entorno de mayor confianza cuando la profesional también es mujer.
"Los datos del Barómetro del Dolor 2020 de Voltadol vuelven a poner de manifiesto la importancia de proveer y facilitar a la sociedad información accesible y de fácil comprensión respecto a las cuestiones que afectan a su salud", explica la general manager de GSK Consumer Healthcare en España y Portugal, Helen Tomlinson. "Conocer las repercusiones que el dolor físico acarrea para las mujeres en su día a día resulta esencial para poder mejorar los tratamientos y las atenciones que se les puede brindar", ha añadido.
Acorde a este estudio, el 93 por ciento de los españoles han sufrido algún tipo de dolencia física durante el último año. Un 34 por ciento afirma sentir dolor a diario y, de ellos, más de un 66 por ciento asegura que el dolor le dura, como mínimo, varias horas. Solo un 12 por ciento afirma no saber la causa de su dolor, si bien uno de cada cuatro encuestados asegura no tener un diagnóstico médico para su dolencia.
EL DOLOR EN LOS 'MILLENNIALS' Y LA GENERACIÓN Z
Tal y como recoge el Barómetro del Dolor 2020 de Voltadol, la Generación Z (con edades comprendidas entre los 18 y los 22 años) y los Millennials (de los 23 a los 38) son las generaciones de españoles más propensas a sufrir determinados dolores físicos. De hecho, un 94 por ciento de los jóvenes (de 18 a 34 años) padece dolor de cabeza, un 64 por ciento dolor de oídos y un 60 por ciento dolor de cuello y hombros. Estos porcentajes se reducen sensiblemente en el resto de las franjas de edad, pues los mayores de 35 años afirman, en un 82 por ciento, sufrir dolores de cabeza, un 41 por ciento dolor de oído y un 47 por ciento dolor de cuello y hombros.
Por otro lado, otra de las principales conclusiones del informe se centra en la labor de los padres a la hora de lidiar con el dolor físico y las atenciones y cuidados hacia sus hijos. Tres de cada 10 progenitores (32%) afirma no sentirse capaz de cuidar de sus hijos por culpa del dolor.
De hecho, un 41 por ciento de ellos ataca rápidamente los síntomas del dolor desde el primer instante en que los identifica para no verse en esa situación. El porcentaje de personas sin hijos que repite esta pauta de comportamiento baja al 35 por ciento. Casi la mitad de los padres españoles (47%) busca consejo de algún profesional de la salud.
El hecho de tener la responsabilidad de los hijos les vuelve más estoicos. Un 81 por ciento de los padres españoles afirma "ser duro" y "sentirse capaz de soportar el dolor físico", frente a un 72 por ciento en el caso de las personas sin hijos.
En el documento también se destaca que la mitad de las madres que sufren algún tipo de dolencia física no pueden recurrir a la ayuda de otra persona para hacerse cargo de los hijos. El porcentaje baja al 43 por ciento cuando es el hombre quien no puede asumir esta tarea y no encuentra la ayuda necesitada.
"Las ocupaciones y obligaciones que conlleva el cuidado de los hijos provoca que más de un 72 por ciento de los padres y madres reconozcan que su calidad de vida también disminuye cuando les afecta algún tipo de dolor muscular", explica la responsable de Voltadol en España, María Jose Nuche.