MADRID, 27 (EUROPA PRESS)
Un nuevo estudio ha encontrado niveles elevados de la proteína inducida por el factor de crecimiento transformante beta (TGFBIp) en muestras de sangre de aproximadamente 100 personas hospitalizadas por COVID-19, y además encontró que los niveles elevados de las formas normal y acetilada de TGFBIp se correlacionaban con la gravedad de los síntomas de la enfermedad en estos pacientes.
Si bien se requerirán más estudios para determinar si los niveles elevados de TGFBIp acetilado pueden servir como un indicador de diagnóstico exclusivo, específico y fiable de la gravedad de COVID-19, la investigación también sugiere que el TGFBIp podría ser un blanco terapéutico viable para tratar la inflamación grave, incluidas las mortales "tormentas de citoquinas, en pacientes que padecen casos graves de la enfermedad.
Si bien se ha trabajado mucho para caracterizar las respuestas inmunitarias de los pacientes con COVID-19, los marcadores inflamatorios y las citoquinas que se sabe que son inducidos por la infección del SARS-CoV-2 suelen ser de corta duración.
En su trabajo, publicado en la revista 'Science Advances', los investigadores se propusieron analizar si el aumento de los niveles de las formas normal y acetilada del TGFBIp, una molécula más estable que se sabe activa el factor de transcripción inmune regulador NF-kB, podría servir como una señal más duradera de la infección por SARS-CoV-2.
Los investigadores analizaron muestras de sangre de controles sanos y de dos cohortes de pacientes con COVID-19: los que fueron admitidos en un hospital para recibir tratamiento con síntomas relativamente leves y los que necesitaban atención en la UCI para tratar el síndrome de dificultad respiratoria aguda (SDRA) y/o la sepsis.
En comparación con los controles sanos, ambos cohortes de pacientes mostraron niveles elevados de TGFBIp, así como niveles más altos de TGFBIp acetilado, y los pacientes de la UCI mostraron niveles aún mayores de ambas formas de proteína.
Al tratar las células inmunes tomadas de estos pacientes con anticuerpos que neutralizan el TGFBIp, los investigadores también observaron una disminución en la producción de citoquinas inflamatorias. Aunque se requerirá más trabajo para validar estos resultados y evaluar la seguridad de los anticuerpos neutralizantes, el hallazgo sugiere, no obstante, que el TGFBIp podría dirigirse a ayudar a tratar la inflamación grave en los pacientes con COVID-19.