MADRID, 13 (EUROPA PRESS)
La mala calidad o poca cantidad de saliva es un problema de salud que no debe infravalorarse y es un fluido corporal al que hay que prestar atención, ha advertido la odontóloga de la dirección asistencial de Sanitas Dental, Manuela Escorial.
"La saliva cumple una importante función lubricante, antibacteriana, antifúgica y cicatrizante en los tejidos. Tiene un papel crucial en el proceso de digestión de los alimentos e incluso llega a influir en nuestra capacidad de habla", ha agregado la experta.
Uno de los problemas más comunes relacionados con la saliva es la xerostomía o síndrome de boca seca. Se caracteriza por la sensación subjetiva de sequedad en la boca, provocada principalmente por un mal funcionamiento de las glándulas salivales.
Es una afección frecuente en el embarazo. De hecho, una de cada diez gestantes la padece, según el estudio 'Patologías bucodentales relacionadas con el embarazo'. Las causas más comunes de la afección son los cambios hormonales: un aumento de estrógenos hace que la mucosa de las vías respiratorias superiores se inflame, lo que produce congestión nasal y rinitis. Como la respiración nasal se ve dificultada, aumenta la bucal y se produce la sensación de sequedad.
Además de la sequedad en la boca existen otros signos bucales que pueden indicar esta patología y que también pueden ser comunes durante la gestación: saliva de textura viscosa y con espumosidad, alteración del sabor de los alimentos, problemas de masticación y deglución, sensación de ardor y dolor en la lengua, sed, fisuras en la comisura de los labios, halitosis, problemas para colocar las prótesis removibles, caries y enfermedad periodontal. Asimismo, la xerostomía puede ser síntoma de diabetes gestacional, una patología habitual de las embarazadas.
Aunque tenga especial incidencia en la mujer y en períodos de cambios hormonales como el embarazo o la menopausia, puede presentarse de forma generalizada en la población. Afecta a una de cada cuatro personas y este índice aumenta a partir de los 50 o los 60 años.
TRATAMIENTO DE LA BOCA SECA
El tratamiento de la xerostomía "debe contemplar la causa que la provoca, y pasa necesariamente por intensificar la higiene bucodenta, beber mucha y por la estimulación de la salivación, por ejemplo, mascando chicles sin azúcar o comiendo alimentos que requieran masticar con mayor energía", ha indicado Escorial.
Si la patología alcanza una gravedad mayor, "estas medidas pueden complementarse con la utilización de sustitutos salivales y el uso de geles fluorados para el cepillado de dientes y de colutorios con clorhexidina", ha señalado la experta.
Estos consejos no se ciñen sólo a las embarazadas, sino que "el resto de la población" también tiene que tenerlos en cuenta, según Escorial.