MADRID, 30 (EUROPA PRESS)
Un tipo de terapia de protones llamada exploración con rayo de lápiz es la mejor opción para preservar las funciones cognitivas en tumores cerebrales infantiles. Esta nueva forma de radioterapia ofrece las dosis más bajas de radiación a los lóbulos temporales y al hipocamo, áreas del cerebro claves en funciones como la memoria, según ha demostrado una comparación de tres tipos de radioterapia presentada en la conferencia anual de la Sociedad Europea de Radioterapia y Oncología.
"Además de la cirugía y la quimioterapia, la radioterapia desempeña un papel importante en el tratamiento de los tumores cerebrales en los niños, pero tenemos que proteger el cerebro en desarrollo de los niños de cualquier radiación innecesaria. Cuanto más aprendamos sobre cómo dirigir eficazmente los tumores cerebrales y al mismo tiempo minimizar la dosis a otras partes del cerebro, mejor podremos preservar las capacidades cognitivas y la calidad de vida de los niños después del tratamiento", explica la autora principal del estudio, Laura Toussaint, del Hospital Universitario de Aarhus (Dinamarca).
Los investigadores realizaron estudios detallados de diez niños diferentes tratados por tumores cerebrales. A cada niño se le había diagnosticado un tipo de cáncer llamado craneofaringioma, localizado centralmente en su cerebro.
Para cada niño, planearon tratamientos con cada uno de los tres tipos de radioterapia: terapia de arco volumétrico modulado (VMAT), terapia de protones de doble dispersión (DSPT) o terapia de protones con rayo de lápiz (PBS). Los tres son tratamientos de radioterapia avanzada, pero DSPT y PBS son ambos tipos de terapia de protones, lo que la investigación sugiere que es mejor para tratar el tumor de forma más precisa, sin afectar a los tejidos circundantes. Sin embargo, requieren un equipo específico costoso, que todavía no está disponible en todos los hospitales.
Usaron tomografías computarizadas y resonancias magnéticas para localizar con precisión las estructuras en cada uno de los cerebros de los niños. Luego, compararon los tres planes de tratamiento de cada niño para ver qué tipo era mejor para evitar la radiación en esas 30 estructuras, categorizando la dosis para cada estructura como alta, media o baja.
Encontraron que las dosis del lóbulo temporal eran más bajas con el tratamiento de PBS, en comparación con los tratamientos de DSPT y VMAT. Además, el 41 por ciento del volumen del hipocampo izquierdo estaba recibiendo dosis bajas de radiación con los planes de DSPT, mientras que se salvaba con el tratamiento de PBS.
Usando los datos existentes sobre los impactos de la radiación en estas regiones del cerebro, los investigadores predicen que las terapias de protones, particularmente el tratamiento con PBS, resultarían en un menor deterioro de la función de la memoria de los niños.
"Hemos analizado tres tipos de radioterapia, que tienen como objetivo tratar con éxito los tumores cerebrales al tiempo. Lo que encontramos fue que la terapia de protones con rayo de lápiz parece ser la mejor para evitar las partes del cerebro que son importantes para la memoria de los niños", detalla Toussaint. El siguiente paso sería confirmar este hallazgo con la investigación clínica en pacientes.