MADRID, 14 (EUROPA PRESS)
Profesionales de Ribera Salud han advertido del aumento en verano de las consultas sobre problemas en los pies como la fascitis plantar (inflamación de una banda gruesa de tejido que atraviesa la planta del pie y conecta el hueso del talón con los dedos de los pies) y las tendinopatías del tendón de Aquiles (inflamación del tejido que conecta los músculos de la pantorrilla en la parte posterior de la pierna hasta el hueso del talón), debido al uso excesivo de chanclas y sandalias.
"El abuso del calzado excesivamente plano impide amortiguar los golpes e impactos que sufre el pie, propiciando la aparición de la fascitis plantar" y, además, añade, "puede producirnos problemas de tensión en el tendón de Aquiles, sobrecarga en los gemelos, arco aplanado y problemas en los tobillos", ha alertado el jefe de Traumatología de Ribera Salud en el Hospital Universitario del Vinalopó, Paulino Sánchez.
Por su parte, Carlos Perucha, podólogo de Ribera Salud en el Hospital Universitario de Torrejón, ha asegurado que el problema con las chanclas y sandalias es que "en la mayoría de los casos este tipo de calzado es muy plano y no tiene ningún tipo de sujeción a nivel de tobillo". Por eso recuerda que "el calzado ideal es aquel que presenta un tacón de unos 2-3 centímetros de altura, suela amortiguada y con algún elemento de sujeción, como cordones o velcro, para dar estabilidad al pie".
Igualmente, Alejandro Herrador, podólogo de Ribera Salud en el Hospital Ribera Santa Justa, ha recordado que el tacón es "antinatural" porque "hace que una persona cambie todas las posiciones articulares del pie, llevando todo el peso corporal a la zona del antepié, lo que provoca un acortamiento de toda la musculatura de la zona posterior de la pierna y hace que se incrementen las curvaturas de la espalda, generando dolores a nivel lumbar". Para el doctor Sánchez, "el abuso de tacones es uno de los factores etiológicos para la aparición de patologías del antepié como el conocido juanete, los dedos en garra o los helomas (también conocido como clavo plantar u 'ojo de gallo'), entre otros.
Por otra parte, los especialistas en Traumatología y Podología de Ribera Salud han aconsejado prevenir en verano infecciones por hongos, el 'pie de atleta' y las verrugas plantares, "muy habituales en esta época del año y que se contagian fácilmente", así como las rozaduras y ampollas por un calzado inadecuado y porque los pies pueden hincharse por el calor.
El jefe de Traumatología de Ribera Salud en el Hospital del Vinalopó ha recordado que el 'pie de atleta' y las verrugas plantares "son patologías que aumentan su frecuencia en verano debido a la humedad extrema y su concentración en los pies por el calor". "La forma de prevenir estas afecciones es utilizar siempre chanclas en lugares de baños públicos, no compartir toallas ni calzado y mantener los pies lo más secos posibles así como, en la medida de lo posible, prescindir de medias o calcetines", ha insistido.