MADRID, 22 (EUROPA PRESS)
Investigadores del Boston Children's Hospital (Estados Unidos), con bioingenieros del City College of New York, han demostrado que unas nanopartículas guiadas por anticuerpos con doble objetivo, que contienen una quimioterapia ya usada y aprobada en la práctica clínica, disminuye los tumores de cáncer de mama triple negativo, su crecimiento metastásico y mejora significativamente la supervivencia en un modelo de ratón.
Entre el 15 y el 20 por ciento de todos los cánceres de mama son triplemente negativos, lo que significa que carecen de receptores de estrógeno, progesterona y factor de crecimiento epidérmico tipo 2. Tienen el peor pronóstico de todos los cánceres de mama y opciones de tratamiento muy limitadas. Encontrar un tratamiento que distinga entre las células cancerosas y las células normales ha sido especialmente difícil.
Dirigidos por Peng Guo y Jiang Yang, los investigadores primero examinaron meticulosamente las líneas celulares de cáncer de mama triple negativo de afroamericanos y caucásicos para ver si llevaban alguno de los 68 antígenos comunes del cáncer. Identificaron 16 objetivos potenciales comunes a todas las líneas celulares de cáncer probadas, y después de una evaluación adicional eligieron dos: los receptores ICAM1 y EGFR, que son abundantes en las células cancerosas pero raros en las no cancerosas.
Después, Guo y Yang determinaron las cantidades relativas y las ubicaciones de cada receptor en las células cancerosas. Además, concretaron la relación entre los receptores ICAM1 y EGFR, que se encontraban muy cerca uno del otro. Basándose en estas proporciones, el equipo diseñó liposomas personalizados con anticuerpos dirigidos a ICAM1 y EGFR en la proporción correspondiente, una técnica llamada focalización complementaria.
Los liposomas complementarios duales de ingeniería (DCL, por sus siglas en inglés) también contenían dos moléculas de lípidos grasos, DOPC y DSPE-PEG-COOH, y doxorrubicina, un fármaco contra el cáncer de mama ya aprobado. Usando microscopía, Guo, Yang y sus colegas verificaron que los liposomas se dirigían específicamente a las células de cáncer de mama y se unían a sus objetivos.
"Hemos evidenciado que cantidades mucho mayores de quimioterapia fueron administradas específicamente a las células tumorales. Esto cumplió nuestra meta de reducir la cantidad total de medicamento necesario para tratar el tumor, reduciendo potencialmente los efectos adversos inducidos por la quimioterapia en pacientes con cáncer de mama triple negativo", explica Guo, cuyo trabajo ha sido publicado en la revista 'Science Advances'.
CONTROLAR LOS TUMORES Y LAS METÁSTASIS
Probados en ratones, los DCL inhibieron el crecimiento de tumores de mama triplemente negativos en cerca de 40 por ciento, en comparación con la doxorrubicina libre (no contenida en los liposomas). También superaron a los liposomas dirigidos a ICAM o EGFR solos.
Los liposomas también reconocieron y redujeron las metástasis pulmonares, una de las principales causas de muerte en el cáncer de mama triple negativo. Aunque los ratones eran de un tipo propenso a las metástasis pulmonares, ninguno de los tratados con los liposomas doblemente dirigidos desarrolló metástasis, frente a dos de los ocho ratones tratados con liposomas dirigidos a ICAM1 solo y seis de los ocho solo con EGFR. Cinco de los ocho ratones tratados con doxorrubicina libre también desarrollaron metástasis pulmonares, al igual que los ocho controles no tratados.
La diferencia más evidente se produjo en la supervivencia. Los ratones tratados con DCL sobrevivieron más tiempo, sin progresión de la enfermedad. Además, los investigadores midieron la toxicidad de los DCL a diferentes dosis al revisar los órganos de los animales y la química sanguínea. No encontraron signos de toxicidad en el hígado o los riñones, incluso en las dosis más altas.
"Un problema clave en la terapia del cáncer ha sido cómo diseñar terapias que distingan las células cancerosas de las células normales, con el fin de minimizar los efectos secundarios. Usar un enfoque racional de medicina de precisión para seleccionar una combinación de objetivos para reconocer células cancerosas es una estrategia que aún no se ha aplicado al cáncer de mama triple negativo", aseguran los científicos.
Los responsables del estudio han solicitado patentes sobre sus tecnologías, que según ellos pueden utilizarse como plataforma para crear tratamientos personalizados para otros tipos de cáncer y enfermedades. Están en conversaciones con diferentes compañías para llevar la estrategia al desarrollo clínico, animados por el hecho de que los elementos de la formulación de liposoma y doxorrubicina y los objetivos de ICAM1 y EGFR ya están aprobados en Estados Unidos.