Pablo Valdés, presidente de la Seram.
Julio de 2018, saltaba la
noticia: una empresa de Nueva Zelanda había desarrollado un nuevo tipo de escáner que permite realizar
radiografías en 3D y a color. El hallazgo supuso una auténtica revolución en el sector y los pacientes que veían en este hecho un antes y un después en el diagnóstico médico, pero ¿es así?
Pablo Valdés, presidente de la Sociedad Española de Radiología Médica (Seram) baja las expectativas de este método, del cual “aún no existe demasiada bibliografía médica”. Además, y en el caso de que el proyecto cuente con la inversión suficiente,
“tendrán que pasar 4 o 5 años” hasta que se puedan ver radiografías en color en los hospitales españoles.
Recreación de la nueva tecnología.
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Actualmente hay muy poca bibliografía médica sobre esta tecnología. Por lo poco que se sabe aún del proyecto se ve que un modelo muy innovador y por lo que sé está en una fase muy inicial. Como pronto, hasta que esa tecnología este validada y sea efectiva pasarán 4 o 5 años.
Aunque nunca se sabe”, explica Valdés.
Una tecnología, ¿revolucionaría?
Esta nueva tecnología, según explicaron sus desarrolladores, podría utilizarse para obtener imágenes más detalladas y precisas que las radiografías tradicionales en blanco y negro y contribuir, de esta manera, a un mejor
diagnóstico médico.
"Las imagenes a color permitirían detectar tumores con mayor facilidad"
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El escáner emplea el
chip Medipix3, el cual funciona de forma similar al sensor de una cámara digital, pero cuando se abre su obturador es capaz de detectar y contar las partículas que golpean cada píxel.
Esta tecnología que parece algo revolucionario, ya se utiliza en otros departamentos de radiología, tal y como explica Pablo Valdés. “Nosotros también podemos obtener imágenes a color, lo que pasa es que debemos emplear un proceso posterior por ordenador.
El color nos ayuda a diferenciar los tejidos. Lo que pasa es que esta tecnología utiliza un escáner muy innovador que lo hace de forma automática”, señala.
Ventajas
Sobre las ventajas, el presidente de Seram subraya que esta tecnología tiene principalmente tres ventajas. “La imagen da mucha más información, da más resolución, y los pacientes se somete a una menor exposición de
rayos X”, enumera.
Aun así, aclara Valdés, el mecanismo utilizado para obtener estas imágenes a color es muy diferente al proceso convencional con el que se obtienen las radiografías.
Estas imágenes a color no se van a obtener del mismo modo que se realizan las radiografías convencionales. Este mecanismo es un escáner en forma de tubo, que da vueltas sobre una parte del organismo en cuestión y se genera un volumen con color, con mucha más información sobre los tejidos.
Esto permitiría detectar tumores con mayor facilidad”, concluye Valdés.
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