Juan José Imbroda, presidente de Melilla
La falta de un acuerdo para desconvocar
la huelga de médicos casi un año después de que se iniciaran las protestas ha llevado al
Gobierno de Melilla a reclamar, por primera vez, las
competencias para tomar las riendas de la sanidad en la región. El equipo de trabajo del presidente de la ciudad autónoma,
Juan José Imbroda, ya ultima una estrategia para hacerse con las funciones que actualmente recaen sobre el
Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa), que depende directamente del Ministerio de Sanidad. El objetivo es buscar un pacto para la “encomienda de la gestión” en el seno de la Comisión de Cooperación, sin que sea necesario articular una mayoría parlamentaria en el Congreso de los Diputados, según ha podido saber
Redacción Médica.
Fuentes de la Presidencia de Melilla han explicado a este diario que la propuesta para convocar este encuentro bilateral se aprobará ya esta semana en el
Consejo de Gobierno de la ciudad autónoma. La orden permitirá reactivar este foro que se constituyó en 2006 por el entonces ministro de Administraciones Públicas,
Jordi Sevilla, quien formaba parte del Gobierno socialista de
José Luis Rodríguez Zapatero.
El Gobierno de Imbroda ha elegido esta fórmula porque considera que un acuerdo con la cartera de Política Territorial, que actualmente dirige Ángel Víctor Torres, permitiría llevar a cabo este cambio de responsabilidades sin la necesidad de modificar el
Estatuto de Autonomía de Melilla ni tampoco de alcanzar un acuerdo en el
Congreso de los Diputados que actualmente cuenta con un mapa complejo de mayorías parlamentarias. “No es necesario, ya que es un acuerdo directo con el Ministerio”, han apuntado.
El equipo de trabajo del presidente melillense da por hecho que esta vía permitiría materializar su petición para hacerse con las competencias sanitarias sin la necesidad de llevar a la Cámara Baja una reforma de ninguna de las grandes normas que actualmente rigen al sector como la
Ley General de Sanidad del año 1986 o el
Real Decreto para la constitución del Ingesa del año 2002 en el que se dio carpetazo al modelo anterior del Insalud.
La huelga de médicos del Ingesa
La petición de la competencia ha cobrado fuerza después de que la huelga de médicos de Ceuta y Melilla se haya cronificado con el paso del tiempo. Los facultativos arrancaron hace 1
0 meses sus propuestas para reclamar el final de las
penalizaciones por compatibilizar el servicio en la sanidad pública y la privada, nuevos incentivos para captar profesionales en las zonas de difícil cobertura, más equipos para los hospitales de las dos regiones o la liberación de las guardias a los 55 años. De momento, las reuniones con los anteriores responsables del Ministerio de Sanidad no han fructificado.
La delegación de estas funciones ha obtenido una respuesta negativa por parte de la bancada socialista que lidera la oposición en la ciudad autónoma. La secretaria general del partido,
Gloria Rojas, ha advertido que la medida implica poner
“al lobo a cuidar las ovejas”, mientras que ha apuntado al Gobierno de Mariano Rajoy como responsable de los problemas de la sanidad arrastrados de las anteriores legislaturas, entre los que incluye la incorporación del copago sanitario o el deterioro de las infraestructuras sanitarias.
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