Cristina Alcalá. Madrid
Pocas sorpresas en materia sanitaria ha deparado el debate que los tres candidatos a liderar la secretaría general del PSOE han celebrado este lunes en Ferraz, la sede de la formación. Los tres socialistas se han centrado más en resaltar otros aspectos, como la regeneración que necesita el partido o la situación en Cataluña, y no han reparado con tanto ahínco en los servicios públicos del país.
De izquierda a derecha, Eduardo Madina, Pedro Sánchez y José Antonio Pérez Tapias.
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No obstante, y a pesar de la escasez de propuestas en este ámbito, tanto Eduardo Madina, como Pedro Sánchez y José Antonio Pérez Tapias han abanderado la sanidad pública en España y, para garantizar su futuro, han propuesto reformar la Constitución para incluirla como derecho inviolable, además de fijar una partida finalista intocable, a través de una inversión mínima sobre el PIB para esta materia, recogida en los presupuestos generales del Estado.
Sus iniciativas siguen el camino del partido
En otros asuntos, y como ya adelantó Redacción Médica, las iniciativas sanitarias de los tres candidatos no distan mucho del ideario de su partido: la lucha contra el Real Decreto 16/2012 que acota el acceso a la sanidad a algunos colectivos de la sociedad o la derogación de la reforma del aborto planteada por el Gobierno del PP son sus principales bazas. Quizás por ello, no se han detenido en debatirlas este lunes.
El copago abre la primera brecha entre candidatos
Solo los matices separan a los tres candidatos a la secretaría general, pequeñas pinceladas que evidencian las discrepancias en sus discursos. El último ejemplo lo protagonizó Sánchez, quien de forma momentánea se salió de lo estipulado por la formación y defendió en su programa “ajustar” la prestación de servicios como la sanidad o la educción “en función de la renta de cada ciudadano”. Una propuesta que el candidato incluyó en el apartado “Sanidad y educación gratuitas para todos” de su programa electoral, y que le supuso muchas críticas desde las filas de su partido.
Sánchez retiró minutos después esta idea de su web, al asemejarse al copago farmacéutico en función de los ingresos que puso en marcha el Gobierno del PP hace dos años, y cambió el texto por uno totalmente distinto, donde se hablaba de "servicios básicos universales y gratuitos", “eliminar los copagos”, “introducir racionalidad” o de “aumentar los recursos destinados a sostener el Estado de bienestar”, pero ninguna referencia al recargo en función de la renta.
La reforma el artículo 135, choque frontal con el 'blindaje' sanitario
Otra de las controversias entre los aspirantes se da en la reforma del artículo 135 de la Constitución, cambio aprobado por el entonces presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, con el apoyo de una amplia mayoría de la Cámara Baja. La reforma daba prioridad presupuestaria absoluta al pago de la deuda, en detrimento de la financiación de los servicios públicos, entre ellos, la sanidad, y que choca frontalmente con la idea de ‘blindaje’ que han acordado este lunes.
Madina, que en 2011 ya era diputado en las Cortes, no rompió la disciplina de voto del partido y apoyó la reforma como la gran mayoría de los allí presentes, y ahora, tres años después, y desde la posición de aspirante a liderar el partido, muestra un discurso más comedido en defensa de lo público.
Por su parte, Pérez Tapias fue de los pocos militantes socialistas que se abstuvieron de refrendar la reforma del artículo 135 y, como aseguró a este periódico, lo cambiará “hasta el punto en el que estaba” para equilibrar los efectos que ha causado la medida.
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