Persona mayor vacunándose.
En
España las residencias experimentaron una gran
morbilidad y mortalidad durante la pandemia del Covid-19, por eso fueron un grupo prioritario al comenzar la campaña de vacunación. A partir de ello, un equipo de investigadores del Centro Nacional de Epidemiología del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), la Dirección General de Salud Pública del Ministerio de Sanidad y la Agencia Española del Medicamento (AEMPS), han analizado la
efectividad de la vacuna Covid de ARNm (
BioNTech/Pfizer, y Moderna) para este colectivo, obteniendo como resultados un
71 por ciento de efectividad para prevenir la infección,
un 88 por ciento para prevenir el ingreso y un
97 por ciento para prevenir las muertes.
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“Las vacunas de ARNm de Covid (BioNTech/Pfizer, y Moderna), administradas en la
primera fase del lanzamiento de la vacuna en España, fueron altamente
efectivas para prevenir no solo las infecciones por SARS-CoV-2, sino también las hospitalizaciones y muertes en ancianos residentes en centros de cuidados de larga duración”, han señalado los autores del estudio publicado en la revista médica
Eurosurveillance.
En España, a 4 de abril de 2021, se reportaron
30.176 muertes relacionadas con Covid-19 entre estos residentes. Cuando comenzó la vacunación el 27 de diciembre de 2020, se dio prioridad a este grupo con las vacunas de ARNm (BioNTech/Pfizer, y Moderna) que estaban disponibles. A 4 de abril de 2021,
300.133 (el 88,8 por ciento) residentes de 65 años o más que vivían en centros de cuidados de larga duración habían recibido la segunda dosis y estaban completamente vacunados, según el Registro Nacional de Vacunación Covid-19 (
Regvacu).
Registro de casos de residentes
Para analizar este registro, los investigadores obtuvieron el
número semanal de casos en ancianos residentes en centros de cuidados de larga duración de la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica (
Renave) por estado de vacunación, del 27 de diciembre de 2020 al 4 de abril de 2021. Como los datos no están integrados en
Renave, los casos en residentes ancianos se definieron como: mayores de 65 años, exposición al Covid-19 en un entorno institucional o residencial, y no ser un entorno social o trabajador de la salud.
“Descartamos los datos de las regiones autónomas sin información sobre la edad, el entorno de exposición, el estado del trabajador sanitario o el estado de vacunación Covid. Incluimos datos de 12 de las 19 comunidades autónomas en el análisis, lo que representó el
66,1 por ciento del total de la población española. Los residentes con infecciones por SARS-CoV-2 (sintomáticas o asintomáticas) (n = 8.379), incluidas infecciones asintomáticas (n = 3.470), hospitalizaciones (n = 2.509) y muertes (n = 1.602) con una prueba coronavirus positiva fueron incluido. Entre las infecciones por SARS-CoV-2, el
82 por ciento fueron confirmadas por PCR y el
18 por ciento fueron confirmadas por prueba rápida de antígenos”, han detallado los expertos.
En conclusión, la
vacunación con ARNm en España fue muy eficaz en la prevención de infecciones por SARS-CoV-2, hospitalizaciones y muertes por coronavirus en ancianos residentes. El nivel similar de protección contra infecciones
asintomáticas y sintomáticas entre los mismos completamente vacunados puede servir como evidencia indirecta de la contribución de las vacunas en la
reducción de la propagación viral en la comunidad. A medida que continúe la campaña de vacunación, serán necesarios estudios adicionales para abordar los efectos de la vacunación contra las variantes emergentes del SARS-CoV-2 y en otros grupos de población y para informar la
respuesta de Salud Pública.
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