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María Márquez. Madrid
Según el informe ‘Indicadores clave del Sistema Nacional de Salud’ hecho público por el ministerio de Sanidad, entre 2008 y 2010 (último año registrado) las comunidades dedicaron algo más de un 9 por ciento a conciertos con la sanidad privada. Cifra ampliamente superada por Cataluña, con una media que ha oscilado entre un 29,73 y 24,12 por ciento, y Canarias, con las cifras más altas del resto de regiones (entre 9 y 10 por ciento). En el extremo opuesto se encuentran Aragón, Extremadura y Cantabria, autonomías que históricamente no han intensificado este tipo de convenios, tal y como apunta Carlos Rus. Este año, según los pronósticos de la FNCP, el escenario será distinto. Recogiendo la tendencia de 2012, las autonomías “romperán los conciertos incluso de un día para otro”. La reducción de las partidas sanitarias obligan a las consejerías a “aprovechar su estructura al 110 por ciento”, señala Rus, lo que le lleva a reflexionar si “antes no funcionaban correctamente o simplemente rechazan los servicios externos para no consolidar más deuda”. Decisión que tiene detrás, en opinión del gerente de la FNCP, “una parte ideológica y también nuevos criterios de gestión”. La lectura negativa es el aumento “considerable” de las listas de espera. Y si en ‘las dos Castillas’ la reducción de los convenios era evidente ya el pasado año, en este ejercicio será especialmente notable en Madrid y la Comunidad Valenciana. |
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