El presidente del Gobierno y candidato del PSOE a la reelección el 23J, Pedro Sánchez.
El presidente del Gobierno y candidato del PSOE a la reelección el próximo 23J,
Pedro Sánchez, anunció hace una semana que, si consigue retener el cargo, aprobará una
ley que limite los tiempos de espera en la sanidad pública. Reducir las listas de espera del
Sistema Nacional de Salud (SNS) se ha convertido, en efecto, en una
prioridad de primer rango, especialmente tras el colapso que sufrió la sanidad española durante la pandemia de coronavirus. Es necesario recordar que en junio de 2020, el tiempo medio de espera para ser intervenido quirúrgicamente alcanzó los 170 días, aproximadamente.
En la teoría, por tanto -rebajar los tiempos-, coinciden todos, pero la tarea pendiente es otra:
acertar en la práctica. Y lo cierto es que la promesa de Sánchez, lejos de entusiasmar, ha sido
acogida con cautela por los pacientes y por las comunidades autónomas, que, no hay que olvidarlo, son las que tienen las competencias en Sanidad.
Más de 165.000 personas llevan más de seis meses esperando operarse
El
Ministerio de Sanidad actualiza los datos del
Sistema de Información de Listas de Espera (Sisle) cada seis meses. A falta de contar aún con el balance de la primera mitad de este año, el último informe disponible refleja que,
a 31 de diciembre de 2022, había 793.521 pacientes pendientes de ser intervenidos quirúrgicamente, con un tiempo medio de espera de
120 días, aunque el
20,8 por ciento de estas personas -es decir, más de 165.000- llevaba en lista de espera
más de seis meses.
Traumatología era la especialidad con el mayor número de pacientes pendientes de intervención: 190.990. Le seguía Oftalmología, con 172.093 personas.
En lo referente a consultas externas, la tasa de pacientes pendientes de ser atendidos alcanzaba las
85,4 personas por cada 1.000 habitantes, con un tiempo medio de espera de
95 días.
Neurología, con 113 días de retraso; Dermatología, con 110 días; y Traumatología, con 102, eran las especialidades más afectadas en este sentido. Eso sí, desde el Ejecutivo nacional se destacó que el tiempo medio de espera ya estaba en niveles posteriores a los de la primera ola de coronavirus.
El compromiso de Sánchez es que
los pacientes no esperen más de 120 días para someterse a una intervención quirúrgica. Además, aseguró que se fijará un
máximo de 60 días de espera para conseguir cita en las consultas externas, 30 días para someterse a pruebas complementarias y 15 días para acceder a una consulta de salud mental para menores de 21 años. La candidata de Sumar,
Yolanda Díaz, también ha prometido tiempo máximo de espera en las listas, aunque sin concretar cifras. “Se acabaron las listas interminables”, anunció en un vídeo colgado en sus redes sociales.
Los pacientes abogan por una renovación integral del SNS
“
No es serio que a pocos días de las elecciones propongan estas cosas”. Lo dice
Andoni Lorenzo, presidente del
Foro Español de Pacientes, que lamenta el tinte electoralista de la propuesta socialista. “Si conocían el problema, ¿por qué no han actuado antes? Si esto se hubiera hecho hace un año, quizás se hubieran
salvado vidas”, lamenta.
Lorenzo señala que el aumento de las listas de espera es consecuencia directa del
“mal funcionamiento” del SNS, que adolece de “falta de médicos y falta de inversión”, entre otras cuestiones: “Cada vez hay más
presión asistencial, más patologías crónicas y pacientes más viejos y más vulnerables”. Por ello, apunta al centro del problema: “El modelo actual es de los años setenta. Lo que tendría que hacer el Ministerio es una
reforma general del SNS, algo que llevamos pidiendo desde hace mucho tiempo, y para eso tiene que convocar a los responsables de todas las consejerías, que son las que tienen las competencias, y llegar a una solución consensuada, lograr un
Pacto por la Sanidad”. En este sentido, atribuye al Ministerio de Sanidad la “responsabilidad” en la gestión para paliar la “falta de equidad” entre territorios.
Las comunidades autónomas se desmarcan de la propuesta centralista
Desde la Consejería de Salud y Consumo de la
Junta de Andalucía (PP), si bien comparten la necesidad de la medida prometida por Sánchez, rechazan que el presidente del Ejecutivo pueda arrogarse la propuesta. "La revisión de plazos es una necesidad que ya planteó al comienzo de la presente legislatura la consejera
Catalina García por la revolución tecnológica de los procedimientos", afirman en declaraciones a
Redacción Médica.
Andalucía es, precisamente, la región española con
mayor tasa de espera en consultas externas,
106,7 días por cada 1.000 habitantes, esto es, algo más de 20 puntos por encima de la media nacional. Sin embargo, desde la consejería andaluza apuntan que ya se está consiguiendo reducir estas cifras gracias a su gestión: "La andaluza es la comunidad autónoma que más ha logrado disminuir el tiempo medio de espera quirúrgica y de consultas de especialistas desde 2018", reivindican. De acuerdo a los datos aportados por las mismas fuentes, en cuanto al área quirúrgica, en 2018, año en el que el PP se hizo con el Gobierno de la Junta, el tiempo medio de espera era de 214 días, y hoy
se ha reducido a 134, es decir, 80 menos. Lo mismo sucede con las listas para la consulta de especialistas. Si en 2018 los andaluces esperaban 176 días para ser atendidos, hoy el tiempo medio se ha reducido a 123 días, esto es, 53 menos que hace cinco años.
Aunque mucho más sucintos, desde la Consejería de Sanidad de la
Junta de Castilla-La Mancha (PSOE) se desmarcan del planteamiento de una legislación centralista sobre las listas de espera: “Nosotros estamos trabajando sobre
nuestra propia ley de listas de espera para garantizar tiempos máximos”, señalan a
Redacción Médica. Eso sí, aclaran que sus responsables están “expectantes” ante las novedades que, al respecto, se den desde el SNS.
Las informaciones publicadas en Redacción Médica contienen afirmaciones, datos y declaraciones procedentes de instituciones oficiales y profesionales sanitarios. No obstante, ante cualquier duda relacionada con su salud, consulte con su especialista sanitario correspondiente.