La estrategia nacional de neurodegenerativas no llegará hasta después del verano

Jesús Vicioso Hoyo. Madrid

Rocío García-Ramos.

La estrategia nacional para el tratamiento de enfermedades neurodegenerativas está en marcha, pero, al final, no estará lista en el primer semestre del presente año, tal y como era la intención inicial de la iniciativa de la que forman parte Sanidad, las comunidades, las sociedades científicas y los representantes de pacientes. Habrá que esperar hasta después del verano para verla completada.

Y no lo estará por el hecho de que se ha aumentado el ámbito de actuación que cubrirá. Al principio estaba previsto la estrategia se centrase en el marco sanitario y, sin embargo, a los grupos de trabajos médicos que arrancaron en junio de 2013 se les sumaron otros, pero de la rama de atención social. Los primeros, al empezar antes, ya tienen aprobada una primera propuesta de objetivos. Está integrada por unos cuarenta propósitos consensuados y su aprobación está solo a expensas del visto bueno de todas las consejerías autonómicas. Eso sí, los cuarenta que están sobre la mesa todavía son demasiados y tendrán que reducirse aún más, hasta quedarse en una lista asequible y real.

“El proyecto iniciado es muy ambicioso y ya se ha realizado un gran trecho, ya que se ha completado el análisis de la situación actual y la primera propuesta de objetivos, que es una paso intermedio importantísimo”, asevera Rocío García-Ramos, miembro del comité que desarrolla la estrategia de enfermedades neurodegenerativas y secretaria de la junta directiva de la Sociedad Española de Neurología (SEN). Asimismo, añade: “Una vez se aprueben este listado por parte de las comunidades autónomas, continuaremos trabajando para ceñirnos más a objetivos reales, que puedan materializarse de verdad”.

Aunque todavía no se pueden desvelar el contenido de los cuarenta puntos de partida, sí que se puede avanzar que se mueven en torno a líneas de unificación, igualdad y equilibrio en cuanto al acceso a tratamientos por parte de todos los enfermos, independientemente de su lugar de residencia, a la vez que también se aborda el asunto de los centros de referencia. Son reivindicaciones, muchas de ellas con cierta solera, que pretenden poner orden a las divergencias actualmente existentes.

Predisposición e implicación de los agentes implicados

García-Ramos destaca la buena predisposición de todas las partes presentes en la confección de la estrategia. “Todos los agentes implicados somos conscientes de la importancia que tiene este proyecto y hay una gran implicación para que salga adelante, completo y realizable, lo que repercutirá en los pacientes de enfermedades neurodegenerativas”, manifiesta la secretaria de la SEN.

Una vez concluyan los grupos de trabajo del ámbito de atención social en el diagnóstico, fase en la que actualmente se encuentran, y se obtenga una propuesta de objetivos, estos tendrán que unificarse con los sanitarios para lograr una estrategia común y definitiva. Todos los agentes implicados quieren que esté lista lo antes posible, aunque su conclusión, por ahora, no tiene una aún fecha definitiva.

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