Redacción. Madrid
La prevención cardiovascular oscila entre mantener a raya los niveles de LDL o bien administrar dosis altas de estatinas con independencia de aquéllos, ya que éstas han demostrado reducir la morbi-mortalidad de los enfermos en cualquiera de los casos.
“Mientras la Sociedad Europea de Cardiología mantiene que debe haber un nivel de LDL-colesterol en plasma que marque un objetivo terapéutico, las sociedades estadounidenses se basan en dosis altas de estatinas potentes sin fijar un objetivo de LDL-colesterol”, ha puntualizado Marcelo Sanmartín, jefe de Sección de Síndrome Coronario Agudo en el Hospital Ramón y Cajal de Madrid. “Aunque ambas tienen sus luces y sus reservas, mi postura es no fijar objetivos de LDL-colesterol”, ha añadido.
Marcelo Sanmartín.
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Unos 250 cardiólogos han acudido a la capital hispalense para asistir a la celebración de Cardio Infocus 2015, una reunión cuyo principal objetivo ha sido realizar una actualización y revisión de las últimas novedades por parte de los expertos asistentes en el campo de la prevención cardiovascular y que ha contado con la colaboración de la compañía biomédica Pfizer.
Durante la reunión, celebrada los pasados días 30 y 31 de enero, se ha abordado el tratamiento actual de los factores de riesgo cardiovascular clásicos como son la hipertensión arterial, diabetes y dislipemia; y cómo las nuevas tecnologías van a cambiar, para mejor, la toma de decisiones en cuanto al tratamiento más adecuado para cada paciente en función de sus condiciones y características.
Entre los aspectos tratados, Vicente Bertomeu, jefe del Servicio de Cardiología del Hospital de San Juan de Alicante, hizo una revisión en profundidad sobre el tratamiento integral del paciente con diabetes que va mucho más allá de la prescripción de medicamentos hipoglucemiantes: “El ejercicio físico, la dieta y otros métodos invasivos para control del peso han demostrado ser necesarios para mejorar el pronóstico de los diabéticos. Así mismo, hemos realizado una revisión de la seguridad cardiovascular de los nuevos medicamentos hipoglucemiantes”, ha señalado al respecto este experto.
Sin embargo, Bertomeu ha apuntado que “hay una importante evidencia que indica que bajar los niveles de LDL con estatinas a altas dosis da lugar a importantes reducciones de morbimortalidad, independientemente del nivel de LDL del que se parta, y, por tanto, los objetivos mínimos no están suficientemente justificados. De todas formas –ha continuado el especialista– en los casos en que los pacientes no toleren dosis altas de estatinas podemos utilizar otras alternativas terapéuticas”.
Se presentaron además, durante la segunda jornada, varios casos clínicos con aspectos fundamentales del día a día en la práctica asistencial de un cardiólogo clínico, encuadrando el manejo de estos pacientes dentro de las recomendaciones de las sociedades científicas, y donde el público pudo participar de forma activa mediante un sistema de votación electrónica.
Como colofón final de los dos días de reunión, se realizó una retransmisión en directo con la Unidad Coronaria del Ramón y Cajal desde unas Google Glass, una iniciativa innovadora y necesaria, ya que el avance tecnológico va a cambiar la práctica clínica haciéndola mucho más eficaz y más eficiente.
“Reuniones como
Cardio Infocus 2015 nos permiten el contacto estrecho entre profesionales de la especialidad para acercar posturas y elaborar vías clínicas para mejorar el cuidado y la atención a los pacientes con enfermedades cardiovasculares”, ha añadido Sanmartín.
Sobre el meta-análisis ATOM
Puesto que la Hipertensión Arterial (HTA) es una enfermedad con una elevada prevalencia en casi todo el mundo, en los últimos meses se han publicado nuevas guías y artículos de gran importancia para la práctica clínica. Uno de ellos es el meta-análisis ATOM, cuyos resultados han sido presentados por investigadores en hipertensión. El objetivo principal de este estudio es perfilar las recomendaciones recogidas en las guías de manejo de la hipertensión arterial (HTA) para ayudar al profesional sanitario en la toma de decisiones respecto al mejor tratamiento antihipertensivo para sus pacientes.
El metaanalisis ATOM analiza el descenso de presión arterial atribuible a los medicamentos de uso común en el tratamiento de la HTA. “Conseguir datos fiables de la eficacia antihipertensiva de los principales tratamientos que se utilizan en la práctica diaria, ya sea en forma de monoterapias o de combinaciones de dos medicamentos, resulta fundamental porque facilita que el facultativo elija con criterio el tratamiento más adecuado en función del perfil clínico del paciente”, ha precisado al respecto Marco A. Paz Bermejo, cardiólogo del Hospital de Santa Caterina y profesor asociado de Cardiología en la Universidad de Gerona.
“Todos los expertos en la materia coincidimos en señalar la necesidad de un correcto control de la presión arterial para que se pueda lograr una reducción de la morbilidad y mortalidad cardiovasculares derivadas de la HTA”, ha concluido Paz.
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