Cristina Mouriño / Ricardo Martínez / Javier Barbado / Miriam Muñoz. Madrid
La aplicación del copago hospitalario en las comunidades autónomas sigue en el aire. A finales de enero solo habían comenzado a desplegarlo Murcia, Ceuta y Melilla, y hasta la fecha el resto de autonomías sigue aduciendo a la falta de medios técnicos para desarrollarlo.
Foto de familia de los consejeros y la ministra de Sanidad en el último Consejo Interterritorial celebrado en diciembre.
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La Consejería de Sanidad y Política Social de Murcia avanzaba en enero a Redacción Médica que “a mediados de febrero o principios de marzo los ciudadanos recibirían la primera factura que contendría los pagos de los medicamentos retirados en el hospital desde el 1 de enero de 2014”. Sin embargo, al cierre de marzo, reconocen que “están trabajando aún en la explotación de datos y procedimientos, por lo que todavía no se ha procedido a solicitar el pago”.
Por su parte, fuentes de la Consejería de Sanidad de Castilla y León, que recurrió la medida al Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), sin que se admitiera la solicitud de suspenderlo cautelarmente; aseguran que “no hay mucha novedad”. Preguntados por si esperarán a la sentencia del TSJM para comenzar a aplicarlo, afirman que “como puede ser un procedimiento muy largo no está claro cuando se empezará, pero no necesariamente se tiene que esperar a que se pronuncie el tribunal”.
En relación al establecimiento de una fórmula de devolución tal y como propusieron algunas autonomías, desde Castilla y León y Extremadura aseguran que “se siguen estudiando fórmulas legales para que no repercuta en el bolsillo de los ciudadanos”, pero reconocen que “es complicado”. Extremadura tampoco ha implantado esta medida. Por su parte, la consejería balear ha asegurado que “no hay novedades al respecto”. El consejero Martí Sansaloni reafirmó en el Parlamento balear que “nadie se quedaría sin recibir atención médica por una cuestión económica”.
Andalucía, que junto a Asturias, Canarias y País Vasco, tiene recurrida la medida, tampoco ha comenzado a implantarlo. Desde Canarias insisten en que la norma que plantea la ministra Ana Mato tiene “más inconvenientes que ventajas”, por lo que tampoco han comenzado su desarrollo.
Por su parte Madrid argumenta que “a día de hoy no está prevista su implantación” ni hay fecha fijada para iniciarlo porque “se están adaptando los sistemas logísticos”. En el caso de Galicia, tampoco se está aplicando, según han reconocido fuentes de la Consejería de Sanidad a este diario.
La Consejería de Salud de Cataluña, que tampoco está desarrollando esta medida, asegura que sigue estudiando cómo aplicar este copago para continuar garantizando el acceso a los medicamentos. El consejero Boi Ruiz ya manifestó que, de no hacerse esta revisión de forma satisfactoria para continuar garantizando la accesibilidad a estos medicamentos por parte de todos los pacientes, el Servicio Catalán de Salud estudiaría cómo implantar las excepciones y límites necesarios para continuar garantizándolo.
La Consejería de Sanidad y Servicios Sociales de Cantabria reitera que “no aplicará el copago hospitalario hasta que lo hagan las demás comunidades autónomas, puesto que se trata de una medida de equidad”. Si lo aplica, “no descarta introducir mecanismos moduladores para asegurar que ningún paciente se queda sin recibir la medicación”. En esta línea también se ha manifestado La Rioja. La Consejería de Salud y Servicios Sociales ha apuntado que “espera una decisión común para aplicarlo puesto que ya tiene los mecanismos necesarios para ponerlo en funcionamiento en cuanto se decida”.
Castilla-La Mancha y Aragón tampoco lo han implantado. Ambas comunidades siguen trabajando en el proceso, según señalan sus consejerías de sanidad, pero no disponen todavía de las herramientas adecuadas para llevarlo a cabo.
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