Los Covid positivos tienen el doble de probabilidad de haber ido a un bar

Un estudio llevado a cabo en Estados Unidos ha asociado la infección por Covid-19 con el consumo en bares y restaurantes. Este trabajo, realizado por el Centro de Control y Prevención de Enfermedades de Atlanta, detalla que esta asociación se debe que “las actividades realizadas en la hostelería son incompatibles con el uso continuado de la mascarilla”.

Esta situación implica una exposición “prolongada e intensa a otras personas que podrían estar infectadas y ser, potencialmente, asintomáticas”, explican en este artículo publicado en Jama Network.

Mayor riesgo de infección

A esta conclusión han llegado después de analizar el resultado de una encuesta realizada en el mes de julio en 314 adultos de 10 estados distintos de EEUU. Este grupo estaba formado por pacientes Covid sintomáticos con resultados positivos en las pruebas de detección del virus y por ciudadanos que dieron negativo, población de control. 

Esta encuesta llevó a los investigadores a identificar actividades comunes entre los positivos que no se daban en los negativos, unos datos que “indican donde hay un mayor riesgo de infección”. El resultado muestra que el hecho de haber estado en un restaurante o en un bar es el doble de común entre positivos que entre poblacion de control.

Los expertos del Centro de Control y Prevención de enfermedades también señalan que el 20 por ciento de las personas infectadas son las que causan el 80 por ciento de los contagios de SARS-CoV-2, dentro de estas se “cree que alrededor del 50 por ciento de los contagios se producen con personas asintomáticas o presintomáticas”.

Rastreo de contactos Covid-19

Para estos investigadores, estos datos presentan un importante desafío para la prevención de los contagios porque se puede aumentar la tasa de transmisión comunitaria “a través de diversas actividades de alto riesgo que involucran a personas asintomáticas que sin saberlo propagan el virus”.

En cuanto al rastreo de contactos de positivos, los expertos reconocen que requieren muchos recursos pero que siguen siendo fundamentales para “identificar y poner en cuarentena a los contactos cercanos de casos confirmados de Covid-19”.