Víctor Pérez Solá, Ana González-Pinto y Celso Arango.
El
estigma y el tabú en relación con los trastornos psiquiátricos pueden dificultar o impedir la búsqueda de ayuda por parte de los pacientes que lo necesita y, por ello, desde Psiquiatría quieren erradicar las malas prácticas periodísticas y sociales que ahondan en la estigmatización de las enfermedades mentales.
En el marco del seminario para medios de comunicación “Sensibilización contra el estigma asociado a la enfermedad mental”, organizado por las sociedades española de Psiquiatría (SEP), Psiquiatría Biológica (SEPB) y la Fundación Española de Psiquiatría y Salud Mental (Fepsm), en colaboración con la compañía Janssen, los diferentes expertos convocados han puesto expuesto la necesidad de tratar correctamente las enfermedades
sin poner en el foco al paciente y el uso de las terapias.
“No se puede culpabilizar a alguien por tener una enfermedad mental, es algo muy cruel. Una enfermedad no identifica a una persona. Nadie es cancerígeno ni es esquizofrénico. Profesionales y medios de comunicación debemos trabajar conjuntamente para difundir una información veraz y de calidad que evite creencias erróneas y discriminatorias para con estos pacientes”, comenta Celso Arango, presidente de la SEP.
Para Arango, el estigma es algo muy preocupante porque genera una vergüenza a acudir a las consultas y acceder a los tratamientos que necesita. Una visión compartida por Ana Gónzalez-Pinto, presidenta de la Fepsm: "Nos creíamos que teníamos la sanidad en nuestras manos, pero ahora vemos que los pacientes no quieren ver lo que les pasa.
La prevención es importantísima y la hacemos toda la sociedad. Los medios tienen una fuerza inmensa en este sentido”
Ana González-Pinto: "Faltan más especialistas, psiquiatras y psicólogos"
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Falta de recursos
Otro de los puntos que ayudan a la escasa detección de las enfermedades mentales, según apuntan los expertos, es la falta de recursos materiales y humanos. “La falta de profesionales en la sanidad pública contribuye a que
la atención de estos pacientes se retrase”, explica González-Pinto.
Para la presidenta de la Fepsm, faltan especialistas, especialmente más psicólogos y psiquiatras, para poner el mismo porcentaje que la media europea. “Cuando la gente quiere ver un psicológico quieren que sea una vez a la semana no una vez cada mes y medio. No hay recursos para que te vean una vez a la semana a no ser que te deriven a un hospital de día y en función de donde caigas”, señala Gónzalez-Pinto.
Por su parte, el presidente de la SEPB, Víctor Pérez Solá, considera que la salud mental tiene dos lacras: poco presupuesto para trabajar y el estigma.
“Es muy importante que las urgencias de Psiquiatría formen parte de las urgencias generales, que las plantas donde están los enfermos mentales estén dentro de los hospitales generales, y con las mismas condiciones de habitabilidad y de estancia que el resto de pacientes“
Celso Arango: "Debemos poner fin al estigma asociado a padecer una enfermedad mental"
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¿Hay estigma dentro de los sanitarios?
Una de las poblaciones más vulnerables durante la pandemia han sido los profesionales sanitarios que han estado en primera línea. Hasta un 40 por ciento de estos profesionales han mostrado síntomas de ansiedad, un 30 por ciento depresión y un 20 por ciento estrés post traumático. “Es fundamental tratarlos, cuidarlos con mecanismos de atención temprana que detecten el problema y nos permitan atajarlo de manera eficiente lo antes posible”, indica el presidente de la SEP.
Entre los profesionales sanitarios también hay estigma en torno a la salud mental, según destacan los expertos. "Que se normalice puede ayudar a muchos de nuestros compañeros", señala González-Pinto. "Los profesionales sanitarios son muy autoexigentes y no quieren coger la baja. Otro componente es el estigma,
tienen miedo a lo que dirán los compañeros. A que se identifique como una debilidad", explica Solá.
Tanto es así que para atender a los profesionales sanitarios que han padecido problemas mentales al estar en primera línea contra el Covid se han tenido que montar circuitos que puedan atenderlos de forma anónima. “Es una realidad en 2021 y nos va a costar mucho cambiarla. La mitad de los profesionales nos han pedido que
les atendieran en otro hospital”, relata el presidente de la SEPB.
“Con la pandemia los equipos de UCI, Urgencias e Interna se han enfrentado a situaciones estresantes. Ante las peticiones de los profesionales hemos intentado crear grupos para darles ayuda, pero incluso
los propios jefes de Servicio no quieren aceptar que estos problemas existen”, explica González-Pinto.
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